El Grupo D de la Eurocopa de Alemania 2024 está marcado por las desigualdades. A pesar de que en los torneos cortos cualquier resultado es posible, Francia parte como gran favorita para hacerse con el primer puesto del grupo, ya que el combinado de Didier Deschamps es una auténtica colección de estrellas que aterriza a Alemania como la gran favorita para llevarse un título que no gana desde el año 2000, y sedienta de éxito después del dolor que causó la derrota contra Argentina en la final del Mundial de Qatar 2022.
Con Kylian Mbappé como principal reclamo y líder, Deschamps tiene a su disposición un equipo poderoso en el aspecto físico y, al mismo tiempo, que rebosa calidad, con jugadores como Camavinga, Zaïre-Emery, Rabiot o Griezmann, a lo que se añaden auténticos puñales por las bandas como Dembélé, Thuram o Coman. La selección gala llega como subcampeona del mundo, con ganas de resarcirse y de hacer historia.
Los Países Bajos, con derecho a soñar
El principal rival de Francia en el grupo será los Países Bajos de Ronald Koeman, que curiosamente ya compitió con los galos en la fase de clasificación. Y los precedentes son nefastos para los tulipanes, que cayeron con estrépito en Francia, con un 4-0 que aún escuece, y que perdieron en la vuelta, en el Johan Cruyff Arena, por 1-2, con un doblete de Mbappé.
Los Países Bajos aterrizan en Alemania con el objetivo de confirmar su mejoría en el último Mundial, en el que se quedaron a las puertas de las semifinales. Koeman tiene a su disposición un equipo muy experimentado, con jugadores curtidos en mil batallas como Van Dijk, De Vrij, De Ligt, Aké, Blind, De Jong, Wijnaldum o Depay, sin olvidar perlas más jóvenes como Gakpo, Simons, Brobbey o Malen. Los Países Bajos son un equipo muy bien trabajado, rocoso defensivamente, aunque sufre a la hora de marcar goles, su gran mal en los últimos años.
Austria y Polonia, cenicientas en busca de la sorpresa
Con Francia y los Países Bajos como grandes tótems del grupo, Austria y Polonia aspiran, teóricamente, a luchar por la tercera posición. Y los favoritos en esta disputa son los de Ralf Ragnick, que en los últimos años han ido a más, con jugadores que han ganado peso en Europa. Su principal estrella es David Alaba, que llegará al torneo después de su grave lesión de rodilla con el Real Madrid, por lo que su rendimiento es toda una incógnita. Ragnick, sin embargo, tiene a su disposición jugadores que han crecido mucho en la Bundesliga, como Laimer, del Bayern de Múnich; Sabitzer, uno de los líderes del Borussia Dortmund; o Baumgartner, del Hoffenheim. Y arriba, ya sin Arnautovic, el peligro es cosa de Gregortsch, que está firmando buenos números en el Friburgo.
La cuarta en discordia es la Polonia de Robert Lewandowski, que después de entrar en la repesca parece que en Alemania vivirá su last dance. El conjunto polaco, rocoso y defensivo, sigue basando su juego en sus grandes nombres, con Lewandowski a la cabeza, seguido por Szczęsny, Zielinski, Bereszynski o Grosicki. Aún y así, Michal Probierz ha ido añadiendo sabia nueva, como Zalewski, una de las revelaciones de la Roma; Kiwior, hombre de refresco en el Arsenal de Arteta; o Slisz, que se ha hecho en los Estados Unidos, en al Atlanta United.