Carlo Ancelotti es un hombre de costumbres y tradicional. Muchas críticas que recibía en el pasado venían desencadenadas por esta razón, ya que siempre apostaba por el mismo once titular y eso ya le costó perder la Liga estrepitosamente ante el Barça por culpa de lesiones inesperadas durante su primera etapa en el banquillo del Santiago Bernabéu.
El técnico italiano es mucho de confiar en los hombres que ya le han demostrado confianza en el pasado y, de cara a las incógnitas que presentan los nuevos fichajes, este modus operandi del técnico de Reggiolo ya las resuelve por sí solo. El caso es que la llegada de Antonio Rüdiger y de Aurélien Tchouaméni ponía en duda las figuras de algunos de los titulares indiscutibles merengues. En el caso de Rüdiger, la ubicación más natural del alemán era en el eje de la defensa desplazando a David Alaba a la posición de lateral izquierdo. En el caso de Tchouaméni, se apuntaba directamente a la figura de Carlos Casemiro, hasta ahora inamovible en la demarcación de pivote del Real Madrid.
Ancelotti sosiega a Casemiro
Desde las altas esferas del Santiago Bernabéu se consideraba a Aurélien Tchouaméni un futbolista con mucho talento y potencial con el fin de ser el relevo generacional de Casemiro en la posición de '6'. No obstante, el hecho de que el Paris Saint-Germain entrara en la subasta por el entonces mediocampista del Mónaco encarecería su precio de lo lindo.
Sea como sea, Florentino Pérez quería sí o sí al futbolista de Rouen y accedió a pagar 80 millones de euros más 20 en variables que, en caso de cumplirse, harían de Tchouaméni un fichaje más caro que el de Cristiano Ronaldo en verano del año 2009. Sin duda, la cantidad levantó mucho revuelo en torno a la operación y, sobre todo, en torno a Casemiro. Se daba por hecho que el presidente merengue no habría soltado tal cantidad para fichar a un suplente y Casemiro, indignado, habría pedido un cara a cara con Carlo Ancelotti para expresar su preocupación conforme a su rol de intocable. No obstante, y según revela el periodista Rodrigo Fáez en ESPN, Ancelotti habría respondido al internacional brasileño sosegándolo y explicándole que el titular es él.
Tchouaméni y Rüdiger partirán de la suplencia
Esta decisión de Ancelotti iría en la misma dirección de sus declaraciones al acabar la gira por los Estados Unidos de los blancos. El técnico italiano dejó claro que la pareja de centrales que utilizaría durante el principio de la temporada sería la misma que tan buen resultado le dio durante la anterior: David Alaba y Éder Militao.
Entonces, con la duda de si Rüdiger ocuparía la posición de lateral izquierdo tal como lo hizo en el Clásico de Las Vegas, Ancelotti también aclaró dudas confirmando que "Ferland Mendy es claramente el titular". Una decisión que traerá mucha cola y promete lío, ya que ha surgido un conflicto de intereses entre Carlo Ancelotti y Florentino Pérez. El presidente prometió minutos a los nuevos fichajes, pero el entrenador seguirá con su filosofía de "si funciona, no lo cambies".