Una de las contrataciones sorprendentes que el Real Madrid cerró en el mercado estival fue la llegada de Iker Bravo. Cuando todo parecía estar sentenciado para que acabara en las filas del Atlético de Madrid, Florentino Pérez consiguió adelantarse y convencer al joven jugador de 17 años. Y llegó a un acuerdo con el Bayer Leverkusen para su cesión, con opción a compra, que estaría cifrada en aproximadamente unos 20 millones de euros. Una muestra de la enorme confianza que hay en su potencial.
Porque no conviene olvidar que estamos hablando de un crack que nació en el año 2005, y que prácticamente no tiene experiencia en la élite. Hasta ahora, su currículum es de solamente unos pocos minutos en la Bundesliga y en la DFB Pokal, y nada más. Sin embargo, los ojeadores no tienen ninguna duda de que acabará convirtiéndose en una estrella mundial, y que puede dar el salto al primer equipo pronto. Eso si, no hay ninguna prisa.
Todavía está en edad juvenil, a pesar de que tiene ficha con el Castilla. Con Raúl González esperan que aprenda mucho, y muestre una evolución interesante, y que esporádicamente pueda entrenar con el primer equipo. Su primer desafío será consolidarse como titular en el filial, con el cual pudo debutar en la pasada jornada de la Primera RFEF, y poco a poco ir entrando en las convocatorias de Carlo Ancelotti. Pero esto será lo más difícil.
Y es que algunos medios han comenzado a señalar que el entrenador italiano no ha quedado impresionado con Bravo en estas primeras semanas. Es más, todo lo contrario, cree que han pagado demasiado dinero por un delantero que, si bien es cierto que es muy joven, demuestra ser demasiado individualista y sobre todo, muy prepotente, uno de los problemas que le llevaron a abandonar Alemania. En el BayArena advirtieron de su poca profesionalidad, y su mal comportamiento dentro y fuera del terreno de juego.
Así que ni siquiera la lesión de Karim Benzema hará que Iker pueda estrenarse en el Santiago Bernabéu próximamente.
Florentino Pérez tiene un problema muy serio con Bravo
Esto deja a Bravo en una situación muy complicada, pero más aún, a Florentino Pérez. Porque confiaba en que este mismo curso pudiera ir entrando en los planes de ‘Carletto’, y disputara algunos minutos. Sin embargo, parece que no será así, lo que lleva a pensar por qué el Madrid ha apostado tan fuerte por el ex del Barça.
Solo queda confiar en que las cosas cambien durante las próximas semanas. Lo que está claro es que, en estos momentos, no convence a Ancelotti.
Tiene mucho trabajo por hacer.