Ansu Fati está más cerca que nunca de decir adiós al FC Barcelona. A pesar de ser una de las grandes promesas de la cantera y de haber portado el mítico dorsal '10', no ha logrado consolidarse en los planes de Hansi Flick. En el partido contra el Estrella Roja, en el que el Barça goleó por 2-5, Ansu no disputó ni un solo minuto. En su lugar, Pau Víctor fue el elegido por Flick para entrar al campo como recambio de Robert Lewandowski, una señal inequívoca de la poca confianza que el técnico alemán tiene en Ansu.
Para Deco, director deportivo del club, esta situación ha dejado una cosa clara: la mejor opción para Ansu y para el Barcelona es una salida en el mercado de invierno. El extremo necesita minutos y oportunidades para reencontrarse con su mejor versión, y todo apunta a que el Sevilla podría ser su destino. El club andaluz, actualmente dirigido por García Pimienta, ha manifestado un interés concreto en el joven jugador. Pimienta, quien conoce a Ansu desde sus años en la cantera, ha solicitado personalmente su incorporación, convencido de que puede ayudarlo a recuperar la confianza y explotar todo su potencial en el esquema sevillista.
Para Ansu, esta oportunidad representa mucho más que un cambio de aires. Sabe que bajo la tutela de García Pimienta podría encontrar ese respaldo y continuidad que tanto ha echado de menos en el Barça en los últimos tiempos. La relación entre el jugador y Pimienta es sólida; el técnico fue uno de sus primeros mentores en la Masía y entiende bien el estilo y las necesidades del canterano. Además, el ambiente en el Sevilla podría ofrecerle una estructura menos exigente y una afición que acoge con entusiasmo a jóvenes talentos, dándole así un espacio para brillar sin la presión constante que supone vestir la camiseta azulgrana.
Deco ya ha avanzado en las conversaciones para concretar el traspaso o una posible cesión de cara al mercado de enero. El director deportivo entiende que la situación de Ansu en el equipo es insostenible y que, a sus 22 años, el jugador necesita minutos de calidad para continuar con su progresión. Desde la directiva, se valora esta salida como una oportunidad para que el canterano recupere su mejor versión, y, al mismo tiempo, el Barcelona podría aliviar un poco la masa salarial y dar espacio a otros jugadores jóvenes que están pidiendo una oportunidad.
A pesar de la decepción que supone ver partir a una de sus promesas, la afición y el club entienden que este movimiento podría ser lo mejor para ambas partes. En el Sevilla, Ansu Fati tendrá la oportunidad de demostrar su calidad y seguir creciendo en un entorno que ya le es familiar y que confía plenamente en él. Todo apunta a que el adiós de Ansu al FC Barcelona está más cerca que nunca, y su próximo capítulo en el Sevilla podría ser la oportunidad que tanto ha estado esperando para relanzar su carrera.