Una vez acabado el mercado de fichajes, todo el barcelonismo celebra la labor de Joan Laporta, Mateu Alemany y compañía. La secretaría técnica del FC Barcelona ha configurado un equipo de lo más competitivo de cara a cumplir las expectativas de la afición. El Barça, este año sí, está obligado a luchar por todos los títulos y Robert Lewandowski y compañía están demostrando que hay suficiente nivel para hacerlo.
La incontestable victoria en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán fue una muestra de que los hombres de Xavi Hernández ya están preparados para dar la bienvenida a la Champions League este mismo miércoles. No obstante, tanto refuerzo de calidad en la plantilla está enervando a algunos de aquellos futbolistas que estaban llamados a la titularidad antes de la llegada de los fichajes. La línea defensiva y la delantera ha sido donde más se ha apuntalado el equipo, y si bien Jordi Alba ha visto cómo ha perdido su plaza de titular, lo mismo ha pasado en el caso de Ansu Fati.
Ansu Fati no está conforme
Ousmane Dembélé es todo uno intocable en las alas del ataque del Barça. Así lo considera Xavi Hernández. Titular en las cuatro jornadas de Liga, y si no es en la banda derecha — la preferida del francés — es en la banda izquierda para dejar a Raphinha jugando a pierna cambiada.
El tridente parece claro, al menos hasta ahora. El galo y el brasileño acompañan a Robert Lewandowski al bloque ofensivo preferido por el cuerpo técnico, mientras que futbolistas como Ferran Torres, Memphis Depay o Ansu Fati forman parte de las balas en la recámara del técnico de Terrassa. El neerlandés y el valenciano aceptan este rol, pero el '10' quiere más. Ansu Fati ha heredado el número del mejor jugador de la historia del club por alguna cosa. Es el llamado a sentarse en el trono de Leo Messi, y quiere justificar la confianza en que el club ha depositado en él cuanto antes mejor.
El Barça deja a Ansu Fati de suplente bajo el argumento que no está al 100%
El joven extremo del plantel blaugrana ya se siente como para ser titular. A pesar de su corta edad, ya ha sufrido dos lesiones importantes y desde las altas esferas del club se quiere tener máxima prudencia con su caso. Ansu lo sabe, y hasta ahora, no estaba incómodo con el hecho de ser suplente de Dembélé o de Raphinha.
Con todo, ya hace mucho tiempo que entrena con normalidad como para seguir llevando el cartel colgado de 'frágil'. Ansu Fati ya se siente al 100% y empieza a pensar que el club utiliza el argumento de la prudencia para alinear a otros futbolistas en su posición. Lo cierto es que no tiene suficientes galones como para exigir la titularidad, pero hay que recordar que fue el propio Barça quien le otorgó el rol de heredero de Leo Messi.