La semana ha empezado con una grandísima noticia en clave blaugrana. Dos meses después de su recaída en San Mamés, en el partido de octavos de final de la Copa del Rey contra el Athletic Club, Ansu Fati se ha vuelto a calzar las botas y la equipación blaugrana para volver a entrenarse con sus compañeros.
Los médicos dan el visto bueno
Cerca de las tres de la tarde, el futbolista del Barça se ha personado en la Ciudad Deportiva Joan Gamper para someterse a las últimas pruebas médicas, programadas para las 15:30h, en las que debía saber si el cuerpo médico le daba, o no, el visto bueno para poder hacer parte del entrenamiento con sus compañeros.
Finalmente, los resultados han sido satisfactorios, y los responsables de los servicios médicos del club han acordado que podía hacer lo que más quiere, jugar al fútbol. En el entrenamiento, previsto para las seis de la tarde, se acordó que el Barça no iba a correr ningún riesgo, y que el atacante internacional con la selección española no participara en los ejercicios donde pueda existir contacto y una posible recaída.
Cabe recordar que después de volverse a lastimar en Bilbao, Ansu tuvo que decidir si quería pasar una vez más por quirófano, algo que le iba a apartar toda la temporada pero que en teoría le haría volver con muchas menos probabilidades de lesionarse de nuevo o, optar por un tratamiento conservador sin tener que operarse.
El Barça no quiere tener prisa
Junto con su familia, decidió esto último y, después de unas semanas viviendo y recuperándose en Madrid trabajando codo con codo con su fisioterapeuta de confianza, Joaquín Juan, Ansu ha vuelto. Aunque es solo un primer paso, denota que la recuperación va por buen camino, pero nadie en el Barça va a tener prisa con él. La lógica alegría la ha hecho pública el Barça en sus redes sociales, donde se ve al futbolista saltando al campo y recibiendo el aplauso de sus compañeros y del cuerpo técnico.
Xavi Hernández dijo después de la recaída que lo único que le preocupaba es que volviera bien y fuerte, sea cuando sea, y que desde el club iban a estar de su lado en todo momento. Al contrario de lo que parecía hace ahora dos meses, el Barça ha sobrevivido sin él, y ahora mismo la mejoría es notable.
Aunque todo el barcelonismo está deseando volver a celebrar los goles de su número 10, nadie quiere volver a lamentar una lesión. La clasificación para la próxima edición de la Liga de Campeones parece encaminada, y aunque Ansu podría ayudar en la lucha por ganar la Europa League, el riesgo es mayor que el premio que se pueda conseguir.