La familia Messi ha vivido esta semana un tremendo susto en París. Y es que según ha adelantado el diario The Sun y confirmado TNT Sports Brasil, se ha producido un asalto en el lujoso hotel parisino Le Royal Monceau, en el cual se hospeda Leo Messi junto a Antonella Rocuzzo y sus hijos, Thiago, Mateo y Ciro.

Según las primeras informaciones, el robo lo perpetraron varios ladrones, que lograron acceder al techo del hotel, desde donde descendieron hasta una ventana abierta del sexto piso. De ahí pudieron entrar en varias habitaciones, de las que sustrajeron varios objetos de muchísimo valor. Los ladrones lograron abandonar el hotel sin ser descubiertos y en estos momentos siguen sin poder ser identificados, lo que todavía ha generado un mayor pánico, pues podrían volver a actuar en cualquier momento.

Roban joyas y dinero

"Pagar una fortuna por un lugar elegante y seguro y que alguien entre en tu habitación es muy perturbador. La Policía nos dijo que vieron a dos hombres con una bolsa en el techo con cámaras de circuito cerrado de televisión, pero no pudieron identificarlos. Dijeron que también se reportaron otros tres robos. Un tipo marroquí en la habitación de al lado me dijo que le habían robado el reloj", explica una mujer al diario The Sun.

Según ha trascendido, una huésped del hotel asaltado ha denunciado el robo de varios objetos de valor, entre los que se encuentran un collar de oro valorado en 3.500 euros, unos pendientes de 580 euros y 2.300 euros en efectivos. Se desconoce si los ladrones lograron entrar o no en la habitación en la que se hospeda la familia Messi y si su elección por el hotel se debe a la presencia del jugador argentino y gran estrella del PSG.

Leo Messi, en un partido del PSG / Europa Press

Los jugadores del PSG, objetivo de los ladrones

Los hechos, como era de esperar, han generado una enorme sensación de angustia en Antonella Rocuzzo, la persona de la familia Messi que pasa más tiempo en el hotel, y ha acelerado la búsqueda de una casa donde poder trasladarse lo antes posible. 

El problema es que los asaltos en las mansiones de los jugadores del París Saint-Germain se han convertido en un hecho bastante habitual y, de hecho, era el principal punto que hacía dudar a la familia Messi con desplazarse a París. Futbolistas como Icardi, Sergio Rico o Marquinhos ya han sufrido robos en sus casas. El último fue Ángel di Maria, amigo personal de Messi, que durante un partido del PSG fue sustituido porque avisaron a Pochettino que mientras se estaba disputando el partido unos ladrones estaban desvalijando la casa del futbolista argentino.

 

Imagen principal: la familia Messi, dando un paseo / GTRES