El Real Madrid se enfrenta a una seria amenaza proveniente de Arabia Saudí, donde el Al-Nassr y el Al-Hilal están dispuestos a lanzar ofertas millonarias para llevarse a Antonio Rüdiger. Ambos clubes están preparando propuestas que convertirían al central alemán en el defensa mejor pagado del mundo. Rüdiger, de 31 años, ha sido un baluarte en la defensa del Madrid, especialmente después de las lesiones de Militao y Alaba, lo que ha elevado su cotización en el mercado.

Tentación desde Arabia

El Al-Nassr, equipo donde milita Cristiano Ronaldo, ya cuenta con Aymeric Laporte como jefe de su defensa, pero la ambición del club no tiene límites. Quieren a Rüdiger para completar una pareja defensiva de primer nivel que podría dominar no solo en la liga saudí, sino en cualquier competición internacional. Por otro lado, el Al-Hilal, dirigido por Jorge Jesús y con figuras como Neymar y Koulibaly, también sueña con incorporar al alemán a su proyecto, donde compartiría vestuario con estrellas como Rubén Neves, Milinkovic-Savic y el portero Bono.

Antonio Rüdiger celebrando el segundo gol del Real Madrid / Foto: EFE
Antonio Rüdiger celebrando el segundo gol del Real Madrid / Foto: EFE

A pesar de estas tentadoras ofertas, el Real Madrid no está dispuesto a dejar ir a Rüdiger. Con las salidas recientes de Nacho a Al-Qadsiah y las dudas sobre la condición física de Militao y Alaba, la necesidad de mantener al central alemán se ha vuelto aún más crítica. El club blanco sabe que su defensa, ya tocada por las bajas, no puede permitirse perder a un jugador de la solidez y experiencia de Rüdiger, especialmente en una temporada donde el equipo aspira a pelear por todos los títulos.

La voluntad de Rüdiger

Rüdiger, por su parte, no parece estar interesado en abandonar el Santiago Bernabéu. Su desempeño bajo la dirección de Carlo Ancelotti ha sido excepcional, y el jugador está comprometido con el proyecto madridista. A sus 31 años, Rüdiger ha alcanzado un nivel de madurez y rendimiento que lo coloca entre los mejores defensas del mundo, y su salida sería un duro golpe para las aspiraciones del Real Madrid.

Aunque los clubes saudíes cuentan con recursos casi ilimitados, la operación para llevarse a Rüdiger se presenta como extremadamente complicada. No solo por la reticencia del Madrid a vender, sino también por el propio deseo del jugador de seguir en la élite europea. El dinero saudí intentará convencer a todas las partes de que el traspaso es beneficioso, pero la realidad es que el Real Madrid no está dispuesto a especular con el futuro de uno de sus puntales en defensa. En este momento, todo apunta a que Rüdiger seguirá vistiendo de blanco, defendiendo con fuerza el escudo del club que confía plenamente en él.