La etapa de Ronald Araujo en el FC Barcelona parece estar llegando a su fin. El central uruguayo está decidido a abandonar el club en este mercado de invierno, con ofertas en firme de la Juventus y el Arsenal sobre la mesa. Aunque ha sido uno de los pilares defensivos en las últimas temporadas, Araujo siente que su lugar en el equipo de Flick se ha desvanecido. Y, según fuentes cercanas al jugador, tiene claro quién es el principal responsable: Pau Cubarsí, la joven promesa que se ha convertido en indiscutible para el técnico alemán.
La irrupción de Cubarsí ha sido uno de los grandes fenómenos de la temporada. Con apenas 17 años, el central ha demostrado una madurez y calidad impresionantes, ganándose un lugar fijo en el once titular de Flick. Su capacidad para anticiparse, su salida de balón impecable y su liderazgo en la zaga han hecho que incluso veteranos como Araujo y Iñigo Martínez queden en un segundo plano.
Para Flick, el futuro de la defensa del Barça pasa por Cubarsí. El técnico está construyendo un equipo que apuesta por la juventud y la proyección a largo plazo, y Cubarsí es una de las piedras angulares de ese proyecto. Esto, combinado con el excelente rendimiento de Iñigo Martínez, ha reducido considerablemente las oportunidades de Araujo, quien ha pasado a ser una opción secundaria.
Lejos de mostrarse resentido, Araujo ha reconocido en privado que Cubarsí está destinado a marcar una época en el club. Según personas de su entorno, el uruguayo valora enormemente el talento del canterano y entiende que su ascenso ha sido uno de los principales factores que han precipitado su salida. Sin embargo, también siente que, en otras circunstancias, seguiría siendo un pilar fundamental en la defensa del Barça.
Consciente de que su protagonismo en el equipo está cada vez más limitado, Araujo ve con buenos ojos las propuestas de Juventus y Arsenal, dos equipos que le garantizan un rol importante y la posibilidad de seguir compitiendo al más alto nivel. Además, su salida permitiría al Barça aliviar su masa salarial y obtener recursos económicos para acometer nuevas incorporaciones.
Para el barcelonismo, la salida de Araujo no será fácil de aceptar. El central ha sido un ejemplo de compromiso y entrega desde su llegada al primer equipo, y su carisma lo ha convertido en un jugador muy querido por la afición. Sin embargo, el propio Araujo parece haber asumido que el momento de partir ha llegado, y que el futuro del Barça está en las manos de jóvenes talentos como Cubarsí.
Mientras tanto, el club trabaja para cerrar su traspaso en los próximos días y comenzar una nueva etapa en la que Cubarsí liderará la defensa azulgrana.