El Arsenal no se detiene, y sigue protagonizando movimientos en el mercado estival. Después de haber cerrado ya a Kai Havertz, próximamente anunciarán las incorporaciones de Jurrien Timber y de Declan Rice, que parecen estar completamente cerradas. Y Mikel Arteta todavía pide más caras nuevas para reforzar la plantilla y poder competir por el título de la Premier League con el Manchester City de Pep Guardiola, como han hecho en la última temporada.
Además, también tendrán como objetivo hacer un buen papel en su regreso a la Champions League, después de muchos años de ausencia. Y está previsto que fichen a otra estrella para la medular, que acompañe al todavía capitán del West Ham United. Es la posición donde más carencias ha encontrado el entrenador vasco, y el elegido para solucionar una parte de esos problemas es Aurelien Tchouaméni, un crack que le seduce enormemente.
Está convencido de que tendría una adaptación rápida y sencilla al combinado ‘gunner’, y por lo tanto su impacto sería inmediato. En el Emirates Stadium opinan que no sería una misión complicada sacarlo del Real Madrid, debido al nulo protagonismo que ha tenido con Carlo Ancelotti en su primer año, siendo suplente habitual, y jugando únicamente en los partidos sin trascendencia. Y el panorama no es nada alentador para el ex del Girondins de Burdeos y del AS Mónaco.
Porque después de la presentación de Jude Bellingham, todo hace indicar que el internacional francés tendrá un papel aún más secundario. Las dudas en el Santiago Bernabéu son entendibles, viendo que fue una apuesta personal de Florentino Pérez, que pagó mucho dinero por el centrocampista de 23 años. Y no ha funcionado como se esperaba, lo que puede traducirse en una venta. Pero, evidentemente, no a cualquier precio.
No se conformarán con una cifra inferior a la que desembolsaron, y por lo tanto los 60 millones de euros que tenían previsto ofrecer los ingleses no serán suficientes. Reclamarán mucho más.
Florentino Pérez pide 80 ‘kilos’ para sentarse a negociar con el Arsenal
80 ‘kilos’ serán necesarios para que Florentino Pérez acceda a sentarse a negociar con el Arsenal, y no perdonará ni un solo céntimo. No hay que olvidar que Tchouaméni sigue siendo muy joven, y por lo tanto tiene un margen de progresión muy importante. Si los de Arteta no están dispuestos a llegar a esa cifra, el Madrid no tendrá problemas en cerrarle las puertas.
Habrá mucho que debatir.