Las restricciones por coronavirus por todo el mundo están protagonizando escenas como fiestas ilegales. Uno de los últimos que habrían acudido a ella habrían sido Arthur Melo y Paulo Dybala. El brasileño y el argentino se desplazaron hasta la casa de su compañero Weston McKennie en Turín y la policía tuvo que tomar nota.
Fiesta de más de 20 personas
El cuerpo policial se presentó a las 23.30 horas y los multó porque se estaban saltando la normativa de prevención de la Covid que hay en Italia. Se saltaron el toque de queda (de 22.00h a 5:00h) y ahora estos tres futbolistas, más el resto de presentes en la fiesta, tendrán que hacer frente a una multa que no ha trascendido la cantidad.
La sanción no será sólo de la policía y es que la Juventus se ha mostrado disgustada con este tipo de actos, según ha informado el Corriere dello Sport. El conjunto italiano pasa por un momento delicado de la temporada después de quedar eliminado de la Champions League, en manos del Oporto, y tienen el Scudetto muy complicado. El Inter, el líder, está a 10 puntos de diferencia, y el Milan, segundo, está a cuatro puntos de margen.
La Juventus ha decidido que dejará a Arthur, Dybala y McKennie en la grada para el próximo partido y es que no les convocará para el derbi contra el Torino, según ha informado este rotativo italiano.
En la fiesta había más de 20 personas y los vecinos de la zona avisaron a la policía, que tuvieron problemas para abrir la puerta del domicilio. En casa de McKennie también había familiares de Arthur y Dybala.
Lirola organiza una fiesta ilegal en Badalona
Este caso surge después de que esta semana se conociera que Pol Lirola, futbolista del Olympique de Marsella, organizara una fiesta ilegal en una casa de Badalona. En el encuentro había más de 33 personas que fueron sancionadas para incumplir la normativa sanitaria. Los agentes fueron alertados por los vecinos, que se quejaron de mucho ruido con el toque de queda en vigor. Los inquilinos se negaron a abrir la puerta a la policía, por lo cual tuvieron que pedir una autorización al propietario del inmueble.
La Guardia Urbana de Badalona, con la ayuda de los Mossos de Esquadra, pudieron entrar en la casa y denunciar a las 33 personas. Lirola fue denunciado por un delito de desobediencia grave a agentes de la autoridad y, varias informaciones aseguraron que no era el único futbolista profesional presente en la fiesta.