Desde un buen primer momento, desde que el azar deparó la vuelta de estos octavos de final de Champions League en Montjuïc, se sabía que el Barça tenía una ligera ventaja contra el Benfica. Jugar el segundo envite en casa siempre es preferible, pero, en este caso, el equipo de Hansi Flick contempla un as en la manga no precisamente menor.
El Benfica tiene hasta 5 hombres advertidos de sanción
La visita del conjunto blaugrana a Da Luz se prevé más tensa que nunca después de que el épico 4-5 de la fase de la liga acabara con los futbolistas prácticamente llegando a las manos. Los ambientes entre ambos equipos están muy caldeados, pero si el Barça acepta el reto y no entra en este juego, puede incluso salir muy favorecido de cara al partido de vuelta.
El caso es que el Benfica tiene hasta 5 hombres advertidos de sanción: Álvaro Carreras, Orkun Kökçü, Zeki Amdouni, Frederik Aursnes y Nicolás Otamendi. 4 de ellos, Carreras, Kökçü, Aursnes y Otamendi, son titulares indiscutibles, mientras que Amdouni es el relevo habitual de Pavlidis en la punta de ataque.
En este sentido, cualquiera de estas bajas sería una ausencia sensible de cara al partido de vuelta. En el caso de Álvaro Carreras, por ejemplo, fue una auténtica pesadilla para la banda derecha culé en el último precedente en Lisboa. El partido del lateral español se saldó con una asistencia e incontables incorporaciones al ataque. Aursnes, por su parte, también fue el autor de uno de los pases de gol, aparte de, como Kökçü, un centrocampista totalmente determinante cuando los de Bruno Lage miraban hacia portería rival.
El Barça, limpio de apercibidos
Y mientras que el Benfica podría verse obligado a plantear el partido de vuelta sin alguno de sus principales argumentos futbolísticos, el Barça, salvo tarjeta roja este miércoles, podrá contar con todos sus efectivos para el partido de vuelta. En este sentido, la plantilla culé llega a los octavos de final de Champions limpia de apercibidos.
Por lo cual, en el factor campo y en este aspecto, el Barça tiene la balanza un poco decantada a su favor. Sea como sea, hay que recordar que jugar el partido de vuelta en Montjuïc es la última vez que sucederá en esta Champions, ya que, tanto para los cuartos de final como para las semifinales, el Barça tendrá que buscar sellar el pase a domicilio.