Fernando Alonso vivió en Baréin la sensación que quería evitar cuando hace un año y medio fichó por Aston Martin. El piloto asturiano deambuló por el circuito del primer Gran Premio de la temporada, en tierra de nadie, sin opciones a luchar por nada más. Así como la temporada pasada arrancó con ilusión, con un Aston Martin solo inferior que Red Bull, ahora tienen a 8 pilotos por delante, ya que Mercedes, Ferrari y McLaren ha evolucionado mejor, dejando muy atrás a la escudería de Lawrence Stroll.

"En clasificación estábamos mucho más cerca de lo que esperábamos, en carrera fue más bien lo que esperábamos. Tenemos que completar la imagen con los circuitos que vienen. Pero está claro que no estamos en una posición para competir contra ellos. En Yeda ya veremos evoluciones. Los coches nunca permanecen iguales, todos los equipos cambian y optimizan, eliminan debilidades tan rápido como se pueda. Nosotros intentamos hacer lo mismo”, afirmó Mike Krack, jefe de Aston Martin, después de la carrera.

Fernando Alonso, piloto de Aston Martin / Foto: Europa Press

El paso atrás de Aston Martin, una realidad

Fernando Alonso ha estado semanas haciendo lo indecible para mejorar el coche, para lograr los ajustes necesarios para ser más competitivo, pero los intentos han sido insuficientes, hasta tener que aceptar la cruda realidad. "Vimos rápido que no podíamos hacer nada contra el top-4. Si haces lo mismo que ellos, terminas a cinco segundos del octavo puesto, así que probamos a alargar los ‘stints’ por si había un coche de seguridad, ya que terminaríamos en la misma posición. No luchamos contra Red Bull ahora mismo, primero tenemos que cerrar la desventaja con McLaren y Mercedes”, añadió Krack.

Y el mismo mensaje quiso transmitir un Alonso decepcionado. "Es exactamente lo que esperábamos. La simulación decía que estaríamos novenos sin mucha lucha delante, porque el top-4 estaba un poco más adelante. Y también con una ventaja cómoda detrás. Ha sido así. Tenía a McLaren 18 segundos por delante y el Sauber 28 segundos detrás", analizó el piloto asturiano.

Christian Horner, jefe del equipo Red Bull / Foto: Europa Press

Red Bull se acerca a Fernando Alonso

El decepcionante inicio de temporada no ha hecho más que convencer a Fernando Alonso de que debe cambiar de aires. El asturiano termina contrato, pero no quiere retirarse sin volver a lograr una victoria. Su primera opción era Ferrari, una escudería a la que le tiene gran estima, pero la puerta se le cerró con el fichaje de Lewis Hamilton.

Todo parecía indicado a apostar por Mercedes, como sustituto de Hamilton, aunque en los últimos días ha surgido la inesperada opción de fichar por Red Bull, sin el conflicto entre Jos Verstappen y Christian Horner no se resuelve. Si Fernando Alonso acaba en Red Bull, el mundo de la Fórmula 1 daría un vuelto espectacular.