El Barça ya suma el primer desastre de la temporada. Derrota con la cabeza baja, sin demostrar el fútbol que se tiene que demostrar y con un gol catedralicio de Aduriz. Partido perdido en San Mamés contra el Athletic Club para empezar la Liga Santander en la presentación oficial de la nueva temporada (1-0). Una noche de sensaciones complicadas, de ineficacia y de malos recuerdos pasados.

Desilusión culé

Sin Leo Messi ya se sabe que todo es más complicado. Y más cuando debutas en un estadio tan imponente como San Mamés, que la temporada pasada ya vio como el Barça empataba sin celebrar ningún gol. Esta vez, en el estreno de un nuevo curso, las sensaciones se han repetido.

Un ilusionante medio del campo con ADN Barça, con De Jong, Aleñá y Sergi Roberto, ha acabado siendo una gran desilusión. Los balones han pasado de largo y aquel fútbol de posesión que tanto gusta los culés y que marea a los rivales, ha acabado escondiéndose. Y ha hecho acto de presencia un intercambio de golpes querido por los vascos.

EFE

Ni el tridente atacante formado por Luis Suárez, Dembélé y un voluntarioso Griezmann ha servido para asustar a un Athletic enfundado con la piel de león de las grandes noches. Y ha sido Iñaki Williams el primer protagonista del partido con su velocidad. Entonces ha aparecido Ter Stegen de entre la desilusión culé que ha aportado un punto de valentía.

No parecía ser la noche del Barça, y menos después de chocar por partida doble con los palos de la portería del Athletic. Primero ha sido Luis Suárez en el minuto 32 después de un error garrafal de la defensa local. Y antes del descanso Rafinha, que acababa de entrar en el campo, con un disparo que Unai Simón, portero del Athletic, ha desviado al larguero. Rafinha precisamente había entrado poco más de cinco minutos antes en el sitio de Luis Suárez, que se ha lesionado en la pierna derecha.

Aduriz trastoca el control

Con el desconcierto generalizado, ha llegado un cambio radical. La valentía le ha durado poco a Ernesto Valverde, que en el descanso ha hecho entrar a Rakitic en el sitio de Aleñá, estéril en la primera mitad. Y gracias a este cambio ha llegado un poco más de control en el Barça.

Pero si desde el primer minuto ya se veía que el partido no sería fácil, ni con un medio del campo más habitual ha habido soluciones. Ofensivamente Griezmann y Dembélé han sido prescindibles, faltados de desmarques, de uno contra uno y de algún socio que les regalara goles medio hechos. A destacar el partido de Rafinha, que ya con un pie fuera del Barça, ha vuelto a demostrar que si está en forma puede ser un recambio de lujo.

Pero ni con ilusión, ni desilusión, ni con más delanteros, ni con más riesgos, este Barça no ha podido hacer nada. Ni un Ter Stegen atent durante todo el partido ha podido evitar la derrota después de una obra de arte de Aduriz.

El delantero vasco acababa de entrar en el campo y en el minuto 89, cuando todo el mundo pensaba en el reparto de puntos, Aduriz se ha vestido de superhéroe para hacer a una chilena memorable, grandiosa e inalcanzable para cualquier humano.

EFE

El Barça ha caído con la cabeza gacha y estrena la Liga con derrota. Algunos culés han recordado las sensaciones de Liverpool.

Desde el primer Barça de Pep Guardiola en el 2008 que no se perdía en el estreno. Y entonces el Barça lo ganó todo. Paciencia y confianza.