El Barça disputa este sábado la segunda jornada de LaLiga 2023-24 en el primer partido oficial de Hansi Flick en el Estadio Olímpico Lluís Companys. Después de la victoria en Valencia (1-2), el equipo quiere continuar con la buena dinámica y llevarse los 3 primeros puntos a casa. Conseguirlo, sin embargo, no será trabajo fácil. Delante tendrán uno de los equipos más fuertes de la liga y un jugador que ya ha roto corazones en Barcelona sin haber marcado ningún gol, todavía. El Athletic Club y Nico Williams no empezaron la temporada de la mejor manera, con un empate contra el Getafe en San Mamés, por eso saldrán a morder como nunca. O, mejor dicho, como siempre.
Barça y Athletic Club siempre han tenido buena relación, y es que les unen más cosas de las que los separan. Es cierto, les separa el hecho de que son rivales y que el éxito de un equipo significa el "fracaso" del otro. Pero los une la hermandad entre Cataluña y el País Vasco, una filosofía propia y los centenares de partidos en que se han enfrentado. Porque, por sorprendente que pueda parecer, el conjunto de Bilbao es, junto con el Barça y el Real Madrid, el único equipo que nunca ha bajado a segunda división. Se cumplen 96 ediciones de La Liga, y el Athletic ha estado presente en todas ellas. Hoy conoceremos un poco más este club histórico.
Un equipo íntegramente vasco, desde los inicios y hasta la muerte
El Athletic Club se fundó el año 1898, cuando el fútbol empezaba a entrar en España. Cuando ya se había consolidado en la élite del país, los socios del equipo tuvieron una idea magnífica. "Y ¿si solo jugamos con jugadores de casa"?, dijo uno, "Jugadores que hayan nacido o crecido en el País Vasco". La idea gustó muy en el momento, una época en que la mayoría de jugadores eran locales en todos los equipos. Han pasado los años, sin embargo, y los fichajes de jugadores extranjeros son nuestro pan de cada día. Hoy día, el Real Madrid, por ejemplo, solo tiene 5 jugadores españoles en su plantilla, y 3 de ellos no juegan absolutamente nunca. El Athletic, sin embargo, 112 años después, se mantiene firme y fiel a su filosofía. Todo jugador vasco tiene el sueño de formar parte del equipo, y su cantera sigue siendo una de las más prolíficas del mundo.
Parece imposible de creer. ¿Cómo un equipo se puede mantenerse tantos años en primera división solo con jugadores locales? Pues es cierto. Y no solo en primera división, sino como uno de los mejores del país. Es el tercer club español con más títulos, con un total de 36, y fue llamado el Rey de Copas durante muchos años por ser el club con más Copas del Rey de España. La última de ellas, este mismo año. También han ganado la liga en 8 ocasiones y la Supercopa en 3. Si bien es cierto que la mayoría de estos trofeos son del siglo pasado, todo el mundo sigue teniendo miedo de este equipo. Pasan los años y el talento vasco sigue saliendo. Vigentes campeones de Copa, clasificados para competiciones europeas un año más y con una de las plantillas más fuertes de la liga. Pasan los años, y el Athletic sigue haciendo historia.
Si las estrellas se marchan, hacemos nuevas
Del plantel vasco han salido decenas de estrellas nacionales. Y, quizás, no ha habido muchas con éxito internacional, pero el espíritu de equipo les ha permitido mantenerse entre los mejores. Se necesitan muchos jugadores para hacer eso durante tantos años. Y es que las categorías inferiores no paran de producir talento. En los últimos años, además, han tenido varios nombres que se han marchado a otros equipos a buscar títulos que no podían conseguir en Bilbao y que han dejado muchos millones al club. Millones que no gastan en otros jugadores, porque solo pueden fichar vascos.
Desde la pasada década, han sacado hasta 221 millones con 4 jugadores de la cantera. Ander Herrera, Aymeric Laporte, Javi Martínez y Kepa Arrizabalaga llamaron la atención de grandes equipos como el Bayern de Múnich o el Manchester City, y son las 4 ventas más caras de la historia del club. Pero, anteriormente, hemos visto jugadores míticos como Iker Muniain, Telmo Zarra, Julen Guerrero o Andoni Iraola. Jugadores que podrían haber triunfado allí donde hubieran ido, pero que se quedaron en casa por amor al club. Este amor es, precisamente, el que los ha llevado donde están hoy. Una de las mejores aficiones de Europa ha hecho de San Mamés uno de los estadios más temidos, y todo es gracias a la pasión.
La última gran superestrella seguro que la conocéis. Después de la temporada que hizo el año pasado y la Eurocopa con España, Nico Williams es uno de los extremos más queridos en toda Europa. Entre otros, el Barça. Williams sigue las huellas de su hermano, Iñaki, pero su futuro será, seguramente, diferente. Mientras el grande ha decidido hacer carrera en Bilbao, a pesar de los centenares de ofertas que ha recibido a lo largo de su carrera, Nico tiene todos los números para marcharse a hacer las Américas. Pero no lo hará sin dejar otra millonada a su equipo para que puedan seguir desarrollando jugadores desde pequeños.