Después de su decepcionante cesión en el Aston Villa, Clément Lenglet ha vuelto a la disciplina del Barça, con el que tiene contrato hasta el 30 de junio del 2026, consciente de que tendrá que volver a salir. El equipo tiene el cupo de centrales lleno, por lo que Hansi Flick puede prescindir del francés, lo que reduciría considerablemente la masa salarial de la plantilla. A pesar de que Lenglet lleva tiempo sin parecerse al que deslumbró en el Sevilla y en su primer año en el Camp Nou, tiene mercado, especialmente en LaLiga, la competición en la que más ha destacado.
Y el último club en interesarse en su situación ha sido el Atlético de Madrid, que está peinando el mercado en busca de un central para la rotación, un jugador que supla la salida de Mario Hermoso. Las mejoras en las relaciones entre Barça y Atlético de Madrid por la última cesión de Joao Félix podría ayudar para que el francés aterrice en el Metropolitano.
El Atlético de Madrid no llega a Hanko y piensa en Lenglet
A pesar de haberse asegurado ya el fichaje de Le Normand, las salidas de Hermoso, Savic y Gabriel Paulista obligan al Atlético de Madrid a fichar a un central más. El número 1 de la lista de Diego Pablo Simeone es David Hanko, del Feyenoord, aunque las altas pretensiones económicas del conjunto neerlandés han provocado que los colchoneros estén contemplando otras opciones, de entre las que destaca la de Clément Lenglet.
Su elevada ficha, eso sí, imposibilita que Lenglet pueda llegar al Atlético de Madrid como traspasado, por lo que todo apunta a que la operación sería una cesión, otra más, aunque el Barça no descarta negociar con el jugador la rescisión de su contrato, lo que le dejaría libre para fichar por el conjunto que considere. Y es que, antes que el Atlético, el Sevilla y la Real Sociedad ya habían preguntado por el central francés, que tiene todos los números de volver a la liga española la temporada que viene, aunque no sea como blaugrana.
El enésimo descubrimiento de Monchi
Lenglet fue uno de los últimos grandes fichajes que cerró Monchi antes de su primera salida de los despachos del Sevilla para fichar por la Roma. El director deportivo andaluz, que ya había captado a un buen número de jugadores semidesconocidos procedentes de la liga francesa, como Keita, Squillaci, Kondogbia, Kanouté, Escudé, Gameiro, Krychowiak, N'Zonzi o Ben Yedder, apostó en el invierno del 2017 por un joven central que estaba destacando en el Nancy. El Sevilla pagó 4,5 millones por Clément Lenglet, en una operación en la que también entró el hermano del francés, Corentin Lenglet.
Y el jugador sorprendió desde el primer día, siendo titular en toda la segunda parte de la temporada y una de las grandes revelaciones del curso 2017/18. Al terminar la temporada, el Barça no lo dudó y puso encima de la mesa los 35,9 millones de su cláusula de rescisión, para que fuera la pareja de Gerard Piqué en el eje defensivo blaugrana. Su rendimiento fue claramente de más a menos, hasta tener que salir como cedido, al Tottenham, logrando antes, eso sí, una renovación, hasta el 2026. Su paso por la Premier League no salió bien, ni con los spurs ni en el Aston Villa, por lo que tiene todos los números de volver a la Liga. Falta por ver si será en el Sevilla, en la Real Sociedad o en el Atlético de Madrid.