Pierre-Emerick Aubameyang fue fichado por el Barça por varios motivos. El primero fue porque no querían desaprovechar la oportunidad de hacerse con un futbolista de su nivel y de su experiencia sin tener que pagar ni un solo euro a cambio. Joan Laporta se enteró de que Mikel Arteta estaba harto de él, y le había apartado del Arsenal, y consiguió llevárselo gratis, después de que rescindieran su contrato. La segunda razón es porque necesitaban a un delantero que ayudara a acabar con los problemas de puntería.

En este sentido, el internacional gabonés no era el favorito, ni la opción que más convencía a Xavi Hernández, pero si era la más asumible desde el punto de vista económico. Porque el resto de candidatos eran demasiado caros, y además sus equipos no estaban dispuestos a negociar sus ventas a mitad de la temporada. Lo que nadie se podía esperar era que el ex de Borussia Dortmund, AS Mónaco, AS Saint-Étienne o AC Milan ofreciera el nivel que ha mostrado desde el primer día.

Se ha convertido en la referencia ofensiva del equipo, y está recordando a su mejor versión. Sin duda, ha sido una gran contratación, y ha justificado la apuesta que hicieron por él, pues las cifras goleadoras que tiene son escandalosas. Eso si, en el Camp Nou también le trajeron con otra esperanza: que fuera capaz de convencer a su íntimo amigo Ousmane Dembélé para que renueve. Esperaban que le presionara, y le ayudara a tomar una decisión sobre su futuro.

‘El Mosquito’ siempre se ha sentido un poco solo en España, uno de los argumentos de peso que tenía para hacer las maletas, y el Barça tenía fe en que la llegada de ‘Auba’ cambiara eso. Se entienden a las mil maravillas fuera de terreno de juego, y también sobre él, como han demostrado en varios partidos, especialmente, en el Clásico contra el Real Madrid. Laporta quiere seguir contando con ambos la próxima campaña, aunque cada vez es menos optimista.

Ousmane Dembélé/ Europa Press

Porque ni siquiera el africano ha sido capaz de hacer entrar en razón al extremo de 24 años. Ya tiene asumido que se irá en junio, cuando finaliza su contrato, y lo hará con la carta de libertad bajo el brazo.

El Paris Saint-Germain le hace una oferta irrechazable

Será una pérdida muy dolorosa para Xavi, que ha demostrado tener una total confianza en Dembélé. No obstante, sabe que poco o nada puede hacer, ya que la propuesta que le presenta el Paris Saint-Germain es irrechazable, y el Barça no puede competir. Le mejoran el salario que percibe actualmente, y también le ofrecen una prima de fichaje superior a los 20 millones de euros.

Nasser Al-Khelaïfi ha convencido al campeón de Mundial de Rusia, que regresará a su país después de seis años, pues se marchó en verano de 2016, para recalar en la Bundesliga.