El Valencia ha empezado con buen pie una temporada en la que el equipo debe optar a salvarse de la quema. Con un propietario con la mirada puesta en hacer negocio y no en invertir en un club que necesita como agua de mayo volver a las posiciones que por historia le tocan, Rubén Baraja ha sido el máximo artífice de la resurrección de los che. Sustentado en el alto nivel que han dado los más jóvenes (Javi Guerra, Diego López o Fran Pérez), los murciélagos duermen en la zona tranquila de la clasificación.
Sin embargo, en los partidos de alto nivel, a la plantilla valencianista se le ven las costuras. El equipo se ha visto muy debilitado, con un gran número de ventas, y muy pocos refuerzos de garantías que permitan a los del Pipo volver a aspirar a las zonas europeas, de donde nunca debería haber salido el cuarto club histórico de La Liga. A pesar de todo, el entrenador del Valencia sigue confiando en sus chicos, consciente de que la temporada es muy larga, y que hay que luchar hasta el final cada partido.
Al Valencia no le vale con lo que tiene
Por esa misma razón, aun a sabiendas de la dificultad para que Peter Lim dé su famoso 'OK' a algunos fichajes, el técnico che ha solicitado a la dirección deportiva la llegada de varios futbolistas que le permitan tener fondo de armario y contar con jugadores de garantías de cara a hacer rotaciones.
Más allá de poder retener a sus mejores hombres como Javi Guerra o Giorgi Mamardasvili, entre otros, el Valencia necesita algún fichaje de cierto nivel, que haga que el equipo pueda tener sangre nueva en las segundas partes, donde el equipo suele bajar el rendimiento y el nivel con los cambios.
Kamada, en la órbita del Valencia
Así pues, según informa todofichajes.com, a la búsqueda de buenas oportunidades de mercado, que faciliten incorporaciones a un precio asequible para un club en ruinas, y con un propietario reticente a gastarse el dinero, el Pipo Baraja ha solicitado la llegada del mediocentro ofensivo de la Lazio, Daichi Kamada.
El japonés no está gozando de demasiadas oportunidades en el conjunto italiano, donde solo ha disputado 10 partidos en los que ha anotado un gol y repartido una asistencia. El nipón tiene contrato con el equipo romano hasta 2024, y su salida en verano es una opción que cada vez coge más peso por su poca importancia en la plantilla.
El Valencia es uno de los equipos que más interés ha mostrado en hacerse con los servicios de Kamada, a coste cero, de cara al próximo mercado veraniego. A sus 27 años, quedaría libre, y los che se ahorrarían los 30 millones en los que está valorado el jugador asiático, en lo que sería un enorme refuerzo para los intereses del equipo valenciano.