Contar con un futbolista joven, prometedor y comprometido no tiene precio. Este es el razonamiento que debe haber hecho el presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, después de rechazar una oferta de 100 millones de euros por Ansu Fati.
Este sábado, el diario Sport apunta que el jueves pasado uno de los directivos de la junta de Bartomeu comentó en una reunión telemática que el club había recibido una proposición de más de 100 millones de euros para fichar al joven delantero hispanoguineano. La respuesta del presidente, siempre según este medio, fue tajante: "No está en venta, no se hable más".
Además, la misma información apunta que la llegada de ofertas por jugadores consagrados y por promesas del plantel genera debate en la directiva de Bartomeu. Mientras unos apuestan por vender con el fin de cuadrar cifras –la crisis del coronavirus hará mucho daño a la tesorería–, otros consideran que hay futbolistas que tienen que ser intocables. El club, como ha pasado históricamente, está dividido.