La mejor noticia para el Barça es que este 2020 ya acaba. El club blaugrana ha vuelto a dejarse dos puntos después de empatar contra el Eibar (1-1) y espera que el 2021 suponga un cambio radical. Sólo un dato, los vascos no habían empatado nunca en el Camp Nou.

Dembélé ha sido un revulsivo, pero no ha sido suficiente en el último partido del año. Los de Ronald Koeman tenían la opción de situarse en posiciones de Champions si ganaban, pero han fallado contra un rival que llegaba en un momento delicado. Leo Messi lo ha estado viendo todo desde la grada y se confirma que su papel es más necesario que nunca.

Los errores de Braithwaite

Una primera parte para borrar para Martin Braithwaite. El danés ha vuelto a confirmar con su titularidad de este martes que puede ser importante con Ronald Koeman, pero sus errores lo podrían penalizar. El '9', delante de Griezmann, ha asumido la responsabilidad de chutar el penalti que le habían hecho a Araújo, pero la pelota no ha ido ni entre los tres palos. Pésima finalización.

Braithwaite, durante el partido / EFE

Braithwaite quería sacarse el mal sabor de boca de haber fallado una pena máxima y pocos minutos después ha marcado. El ex del Leganés ha abierto la lata después de un buen remate, pero el VAR ha anulado el tanto por un fuera de juego claro, pero muy justo.

No ha sido una buena primera parte para el Barça que ha tenido un ritmo bajo y con un Koeman que ha repetido sistema con tres defensas y dos carrileros. No obstante, el efecto Valladolid no ha sido el mismo. Precisamente en el día de hoy, ninguno de los tres centrales ha tenido un buen rendimiento y han protagonizado varios errores imperdonables.

El más grave ha sido de Araújo que ha sido aprovechado por Kike García. El delantero del Eibar ha avanzado a los suyos en el luminoso y el Barça tenía que remar a contracorriente para cambiar la situación.

Bajo la mirada de Messi

Todo eso bajo la mirada de Leo Messi, que ha llegado a tiempo y ha podido ver el duelo desde la grada. Recordamos que el argentino, según la versión oficial, tiene unas molestias en el tobillo que le han imposibilitado jugar contra los vascos. Este hecho no tiene que preocupar al barcelonismo y para el próximo partido se podrá contar con el capitán culé, que recientemente ha roto su silencio.

Messi y Ansu se saludan / EFE

Otro de los nombres de la noche ha sido el de Ousmane Dembélé. El francés ha vuelto después de superar sus problemas en los isquiotibiales y ha revolucionado el partido. El ex del Dortmund ha marcado el gol que ha supuesto el empate con una gran jugada en ataque.

Antoine Griezmann, titular, y Philippe Coutinho, que ha entrado por él, han vuelto a desesperar. Una vez más, francés y brasileño no han sido trascendentales en el juego culé. Por si no había suficiente, Coutinho se ha marchado del campo lesionado. El Barça ha tenido la opción de hacer el segundo, pero la pelota no ha querido volver a entrar. Los blaugrana siguen complicándose la vida en la Liga en esta temporada de transición.

 

Imagen principal: Dembélé celebra el gol del Barça / EFE