El Barça ha conseguido una victoria crucial contra el Dreamland Gran Canària (74-77) que le permite seguir luchando por una plaza en la Copa del Rey, un torneo que se disputará precisamente allí, entre el 13 y el 16 de febrero. Esta victoria agónica llega en un momento clave para los blaugrana, que necesitaban el triunfo para sumar puntos y asegurarse un lugar entre los mejores equipos de la competición.

De esta manera, el Barça se mantiene en la parte alta de la clasificaciónde la ACB, manteniendo así sus opciones de entrar en la Copa del Rey, donde ahora mismo dependen de ellos mismos para estar. Las cosas no han sido fáciles para los de Joan Peñarroya, que han tenido que hacer frente a un rival muy competitivo. El triunfo se ha basado en una gran actuación de Kevin Punter, quien, con 22 puntos, ha sido clave para la victoria.

Kevin Punter, de nuevo el héroe

El partido ha empezado con un ritmo intenso, con el pívot del Gran Canaria, Mike Tobey, y el argentino Nico Brussino liderando el ataque de los locales. A pesar del buen inicio del Barça, con canastas de Metu y Satoransky, los canarios han conseguido una ventaja inicial. En la segunda mitad, el Barça ha obtenido 12 puntos de ventaja, pero el Dreamland no se ha rendido. Con Brussino volviendo a aparecer con dos triples, los canarios han conseguido recortar distancias. El tercer cuarto ha concluido con un marcador ajustado (56-61). Con la igualada en 64-64, el partido se ha intensificado todavía más. Punter se ha vuelto a vestir de héroe, mientras que los locales ha intentado recuperarse en los momentos finales. Finalmente, el Barça ha podido asegurar la victoria con una canasta de Punter y una falta en ataque de los locales.

Semana clave en el Palau Blaugrana

Así pues, el equipo de Peñarroya ha salvado el primer match-ball en Gran Canaria, pero no tiene la clasificación confirmada. Para hacerlo, tendrá que ganar su próximo duelo en la liga ante el Surne Bilbao Basket (doceavo clasificado), un partido que se disputará el próximo 19 de enero al Palau Blaugrana. Antes, sin embargo, los culés tendrán que pasar dos pruebas de fuego, también en casa, pero a la otra competición, la Eurolliga. En esta se sitúan octavos y tienen las mismas o incluso más necesidades de victoria que en la ACB. Los rivales serán el Panathinaikos (segundo clasificado) el 15 de enero y el Anadolu Efes Istanbul (undécimo clasificado) dos días después.