Después del empate a tres contra el Inter de Milán, el Barça tiene pie y medio fuera de los octavos de final de la Champions League, y es el momento de encontrar culpables. Sin duda, Xavi Hernández merece ser uno de los señalados, pues solamente han podido ganar un partido en todo el torneo, cuando en principio partían como uno de los favoritos a ganar la copa. Puede excusarse con las numerosas lesiones que ha habido, y las decisiones polémicas en contra del conjunto azulgrana, pero eso no consuela a la afición.
Al margen del entrenador, también hay muchos jugadores que han decepcionado, como Raphinha, que no ha sido decisivo en ningún choque de máxima exigencia, o Sergio Busquets. Pero sin duda el gran perdedor del enfrentamiento frente a los italianos fue Gerard Piqué, que fue titular aprovechando las bajas que había en la retaguardia, con Andreas Christensen, Jules Koundé y Ronald Araújo en la enfermería. Una oportunidad única para reivindicarse.
El ’3’ podía demostrar que seguía estando capacitado para poder ayudar al equipo, y que su suplencia es injusta. Nada más lejos de la realidad, pues acabó siendo criticado y silbado por el Camp Nou, después de firmar una actuación desastrosa. En todo momento se mostró muy poco seguro y contundente, y quedó retratado en el gol de Nicolo Barella, que puso el provisional uno a uno en el marcador. En la última diana de los ‘neroazzurri’, obra de Robin Gosens, también pudo haber hecho mucho más.
Esto no ha hecho más que dar fuerza al argumento de Xavi, que consideraba que ya no estaba capacitado para poder jugar en este tipo de partidos, y solamente ha recurrido a su excompañero en caso de extrema necesidad. Físicamente está lejos de su mejor versión, y es evidente que el paso del tiempo no perdona a nadie, pues hay que considerar que ya tiene 35 años. Pero lo peor es que tampoco se está cuidando como debería, una cosa que todos saben en el Barça.
Creen que a día de hoy Piqué está más centrado en su vida personal y en sus negocios y sus empresas que en sus compromisos futbolísticos. Lógico que estén cansados de él…
Piqué, peor que Neymar Junior
Y tampoco ha pasado desapercibida la vida nocturna de Piqué, que era un habitual en los reservados de las mejores discotecas de Barcelona. Después de su separación de Shakira, recuperó su gusto por las fiestas, que ya había exhibido durante su juventud, como él mismo reconoció.
Aunque ahora se ha calmado un poco, ha tenido que soportar comparaciones con Neymar Junior, otro ex del Barça al cual le encantaban las salidas nocturnas, si bien en su caso, al menos después rendía sobre el terreno de juego.
Una cosa que ‘Geri’ no está haciendo este año.