En los últimos 15 años, en el Barça no preocupaba la posición de pivote defensivo. Sergio Busquets era el dueño absoluto y tenía un largo camino por delante, por lo que era un tema resuelto. Es por ello que cuando llegó el momento de que Sergio Busquets hiciera las maletas, en el Barça se activó un nuevo grave problema, el de encontrar un nuevo jugador para una posición fundamental en los esquemas del Barça. El elegido parecía ser Nico González, que no convenció a Xavi Hernández, por lo que finalmente se decidió fichar a Oriol Romeu, un jugador de rendimiento inmediato, pero insuficiente pensando en el futuro.

El Barça, pues, está peinando el mercado internacional en busca de un mediocentro joven que sea capaz de jugar solo por delante de la defensa, con dos interiores a los lados, un futbolista con buen toque de balón, inteligente tácticamente y capaz de unir las líneas del equipo.

El Barça, a por Federico Redondo

Y uno de los nombres que está encima de la mesa de la dirección deportiva del Barça es el de Federico Redondo, que con solo 19 años se ha convertido en uno de los referentes de Argentinos Juniors. Con solo 20 años, el centrocampista ya es titular indiscutible con el Bicho, además de jugar habitualmente en las categorías inferiores de la selección argentina.

Federico Redondo termina contrato con Argentinos Juniors el próximo 30 de junio y, de momento, no tiene ninguna intención de renovar, lo que podría obligar al club a traspasarlo en el próximo mercado de invierno. El precio de salida es de 4 millones de euros, aunque el problema es que el Barça no es el único club interesado en el centrocampista, que también tiene ofertas del Real Madrid, del Manchester United y del Milan.

Sergio Busquets, en un partido del Inter Miami / Foto: Inter Miami CF

Hijo del mítico Fernando Redondo

Federico Redondo lleva en los genes la posición. Y es que es el hijo de Fernando Redondo, uno de los mejores centrocampistas defensivos del mundo en la década de los 90. Como su hijo, el Príncipe inició su carrera deportiva en Argentinos Juniors, para dar el salto a Europa a través del Tenerife. Y en el club chicharrero formó parte de un equipo histórico, con jugadores del nivel de Ezequiel Castillo, Chano, Dertycia o Pier, con Jorge Valdano en el banquillo.

Su excelente nivel lo llevó al Real Madrid, donde logró el éxito. El argentino, elegante y efectivo, ganó 2 Champions Leagues, 2 Ligas y 1 Copa Intercontinental, para fichar después con el Milan, donde ganó otra Champions League y una Liga. Ahora puede ver como su hijo coge el testigo, un jugador con un futuro espléndido por delante.