El Barça sigue liderando la Liga Santander después de superar a un complicado Leganés (3-1). Pero ha sido gracias a Leo Messi, que sólo con media hora ha tenido suficiente para hacer despertar al equipo en el Camp Nou. Ousmane Dembélé, protagonista por un gol, también lo ha sido por una lesión.
Dembélé hace de Messi
El futuro del Barça será como el de esta noche del domingo en el Camp Nou: sin Messi. Los culés, que desde la lesión hacía unos cuantos partidos que no se ponían a prueba viviendo sin el argentino, se han visto obligados a crecer de golpe. El epicentro de todo siempre es el '10', pero contra el Leganés, con bastantes cambios, Ernesto Valverde ha pensado en el futuro.
Entre Copa y Copa, tiene que haber rotaciones y, esta vez sí, experimentos sin riesgos. Han entrado en el once titular sólo Vermaelen y Aleñá entre los no habituales. Arthur ha aportado su pausa en el medio del campo y también pases a un tridente diferente formado por Dembélé, Coutinho y Luis Suárez.
Cuesta vivir sin el mejor. Es obvio. Pero el Barça ha sabido adaptarse. Faltaba la oxigenación de Messi, que ha intentado adoptar Coutinho. Y faltaba el desequilibrio del argentino, que ha sido tarea de Dembélé. El francés, ya en su mejor versión de esta temporada, sigue creciendo, y con su velocidad ha hecho fantasía.
Dembélé se ha creído Messi e, incluso, se ha asociado con Jordi Alba para hacer la clásica jugada con pase de la muerte del lateral catalán. Y esta vez estaba el francés, que al primer toque y con la ayuda del palo ha dado la tranquilidad al Barça en la media hora de partido.
Todo el mundo tenía presente que el Leganés había sido el primer equipo en derrotar al Barça esta temporada. En Butarque se sufrió, pero en el Camp Nou parecía que todo era distinto.
Empate y lesión
A las buenas noticias y después de marcharse al descanso con el partido bien encarrilado, han llegado los problemas. Buen partido de Athur y Aleñá en el medio del campo hasta que el equipo ha hecho un bajón de rendimiento. Poco a poco y ya en la segunda mitad se ha ofuscado. Sólo Dembélé hacía creer a los culés.
Y entonces han llegado dos malas pasadas. Primero el empate de Braithwaite, y después la lesión de Dembélé. El Barça pierde al francés, que se ha hecho daño solo con una posible doble lesión en la rodilla y el tobillo.
Media hora de Messi es suficiente
Pero entre el gol y la lesión, ha entrado al campo Messi por Aleñá, que ha hecho calentar al Camp Nou, que con poco más de 50.000 espectadores ha presentado la peor entrada de la temporada en la Liga. El argentino, el mejor ni que esté frío, ha cambiado el partido.
También han entrado Rakitic por Arthur y Malcom por Dembélé, y el Barça ha hecho el segundo gol. Un disparo de Messi que se ha envenenado y Luis Suárez ha rematado desde dentro del área pequeña, haciendo caer al portero. El gol no ha subido al instante y ha necesitado la confirmación del VAR.
Veinte minutos más de buen fútbol y de Messi para que poco a poco los culés fueran perdiendo el miedo. Siete minutos de añadido y el mismo Messi ha sentenciado con el tercero. Al final victoria del Barça, séptima consecutiva en la Liga y mantiene la distancia de cinco puntos en el liderato. Y el Leganés sigue sin puntuar en el Camp Nou.