El Sadar de Pamplona nunca es una visita asequible, y menos desde que Jagoba Arrasate es el entrenador de Osasuna. Los rojillos, empujados por su animada afición, son un equipo intenso y vertical, lo que obliga al rival a trabajar duro y a ser preciso. Y el Barça lo ha vuelto a comprobar este domingo, en el que han tenido que sudar sangre para llevarse los 3 puntos del Sadar. Los blaugrana han llegado al tramo final por delante en el marcador, hasta que el Chimy Ávila, con un golazo, ha logrado un empate que hacía temer lo peor, un pinchazo que alejaba a los blaugrana a 4 puntos del Real Madrid, y con 2 largas semanas sin competición de clubes por delante, por el parón de selecciones. Y ha sido entonces cuando ha aparecido Lewandowski, que la temporada pasada había sido expulsado en el Sadar. El polaco ha forzado un penalti y una expulsión, de Catena, para después marcar el 1-2 desde los 11 metros, con una tranquilidad solo al alcance de los mejores.

Xavi Hernández quedó satisfecho con el partido del Barça en Villarreal, por lo que el entrenador blaugrana ha repetido la alineación del estadio de la Cerámica, con el único cambio de Alejandro Balde por Marcos Alonso. El resto de la defensa la han formado Sergi Roberto, Koundé y Christensen, con Oriol Romeu, De Jong, Gavi y Gündogan en el centro del campo y Lewandowski y Lamine Yamal en ataque. En el banquillo, pues, Joao Félix y Joao Cancelo esperaban su turno.

Jules Koundé, celebrando su gol contra Osasuna / Foto: EFE

Koundé abre la lata antes del descanso

El Barça ha empezado muy bien, con ritmo muy alto, en busca de un gol rápido, y en el minuto 2 Frenkie de Jong, después de una dejada de Gündogan, ha disparado al palo. Y en el minuto 11 ha sido el turno del alemán, que ha disparado desviado cuando estaba solo ante el portero. Después de los sustos iniciales, Osasuna se ha repuesto, ha intensificado la presión y ha empezado a pisar área y a jugarle al Barça de tú a tú. Lewandowski, muy incómodo en toda la primera parte, lo ha intentado con un disparo centrado (26'). La respuesta de Osasuna la ha protagonizado Aimar, que después de una excelente jugada colectiva ha visto como Ter Stegen evitaba el 1-0.

Y cuando parecía que el partido se iba al descanso con el 0-0 inicial ha llegado el gol del Barça, en una acción a balón parado. Gündogan ha ejecutado un córner al corazón del área y Koundé, entrando por potencia, remata con la cabeza al fondo de la portería. Osasuna ha pedido falta a Ibáñez, en el salto, pero tanto el VAR como el árbitro han considerado que era una disputa limpia entre Koundé y el jugador rojillo.

Lewandowski, celebrando con Ferran Torres el 1-2 / Foto: EFE

Empate y gol de Lewandowski de penalti

Osasuna ha salido con fuerza tras el descanso, consciente de que el 1-0 había desactivado el plan inicial. El Barça, por su parte, ha intentado calmar el ritmo con largas posesiones, aunque sin olvidarse de atacar. Xavi Hernández ha puesto en el terreno de juego a Cancelo, que debutaba, y a Ferran Torres, mientras que Jagoba Arrasate, viendo que no llegaban las ocasiones, ha puesto toda la carne en el asador, dando entrada al Chimy Ávila y a Budimir. Los cambios han dado fuerza a Osasuna, que por momentos ha logrado meter al Barça en su área, aunque sin generar ocasiones claras de gol. Aún y así, los rojillos han logrado el empate, en una acción aislada. el Chimy Ávila caza un balón en el borde del área y supera a Ter Stegen con un obús imparable ajustado al palo (76').

El partido se le había puesto muy cuesta arriba al Barça, pero justo después ha llegado la jugada polémica del partido. Pase filtrado de De Jong a Lewandowski, que al controlar el balón es derribado por Catena. La acción ha sido revisada por el VAR y el árbitro no solo ha ratificado el penalti, sino que ha expulsado al central local. Lewandowski ha asumido toda la presión y ha transformado el penalti con una tranquilidad espectacular. 3 puntos clave para no perder de vista al Real Madrid en la clasificación.