El Barça no falla contra la Real Sociedad y recupera el segundo puesto de la Liga (2-0). Los goles de Lamine Yamal (40') y de Raphinha (90+3') han hecho que los culés vuelvan a depender de sí mismos para acabar segundos de esta liga.

El Barça juega con fuego con Becker

Con el Girona habiéndose dejado 2 valiosos puntos en Mendizorroza (2-2), el Barça tenía la obligación de salir a buscar los tres puntos. Delante, la Real Sociedad también necesitaba sumar después de que este domingo el Betis le arrebatara la sexta plaza de acceso directo a Europa League. No obstante, ni el ritmo del Barça haría justicia a la oportunidad que se le presentaba ni el planteamiento de la Real, con armas como Kubo o Barrenetxea en el banquillo, parecía muy ambicioso.

De hecho, en el Reale Arena, el japonés y el donostiarra fueron los hombres que más contra las cuerdas consiguieron poner a los blaugrana. Este lunes, sin embargo, los hombres de fuera de Imanol Alguacil serían un Jon Aramburu que emulaba un lateral izquierdo más para contener a Lamine Yamal y un Oyarzabal que flotaría por zonas de mediapunta con balón. La amenaza ofensiva, pues, caía sobre un Sheraldo Becker que tendría la principal misión de explotar la espalda de Cubarsí e Iñigo. El catalán y el vasco, sin embargo, demostrarían su gran sincronización al dejar en fuera de juego en hasta 6 ocasiones al surinamés, eso sí, metiendo el susto en el cuerpo a los culés con un gol invalidado del delantero por posición antirreglamentaria.

Becker gol anulado Barça Real Sociedad / Foto: EFE

Lamine Yamal, sazona una primera parte insípida

El Barça, por su parte, propondría más y mejor, pero sin inquietar a Remiro más allá de un golpeo al palo de Raphinha en el 37'. Sería Robert Lewandowski quien más empeño pondría para hacerlo, ganando todas las caídas y especialmente implicado en esta primera mitad. De hecho, de sus botas nacería la brillante jugada del primero.

En una primera mitad gris, el '9' pondría el color. Con un brillante pase para habilitar a Gundogan, el alemán buscaría el contrapié de un Aramburu que era el último escollo antes de Remiro para habilitar a un Lamine Yamal que no fallaría cruzando la pelota con el interior de la zurda. Así se iría el partido al descanso, contabilizándose como gol el segundo disparo a puerta del conjunto culé.

Lamine Yamal, celebrando su gol / Foto: EFE

El Barça se reencuentra con la solidez y Raphinha culmina el trabajo

Con el corto 1-0 en el marcador, la Real Sociedad se quedaría a un palmo del empate en un disparo demasiado cruzado de Brais Méndez desde una posición franca. Imanol Alguacil movería ficha para dar entrada a Barrene, Kubo y Tierney en un triple cambio que llevaba la revolución implícita. Con todo, era el Barça quien seguía teniendo la pelota y quien más cerca estaría de volver a mover el electrónico. Raphinha, de nuevo con otro gran intento desde la larga distancia (64'), obligaría a Álex Remiro a volar. Ferran, en el 76,' estaría cerca de llegar y besar el santo después de saltar al campo segundos antes en el puesto de Lewandowski.

El Barça estaba buscando el gol de la tranquilidad con insistencia, pero también se lucirían los de atrás con un Ter Stegen seguro cuando ha tenido que trabajar y, sobre todo, con un Pau Cubarsí gigante. El joven gerundense bailaba hoy con una incómoda pareja. Becker es rapidísimo, pero ni en el cuerpo en cuerpo, ni a la espalda, ni de ninguna de las maneras podría la Real encontrarle las cosquillas hoy a una defensa culé comandada hoy por el novato. De hecho, lejos de hacerlo, sería Raphinha quien culminaría el trabajo desde los 11 metros ya en el tiempo añadido. Ahora, de nuevo, el Barça depende de sí mismo para volver a ser segundo.