La palabra 'Laminedependencia' empieza a sonar con fuerza en Barcelona. Aunque Lamine Yamal todavía no ha cumplido los 18 años, su incidencia en el juego del Barça es total. Así se demostró el pasado domingo en el campo de la Real Sociedad (0-1), en un partido en que el equipo de Hansi Flick encajó la segunda derrota de la temporada, firmando un partido muy pobre, sobre todo en el ámbito ofensivo. Es cierto que el enfrentamiento estuvo marcado por el polémico gol anulado a Robert Lewandowski en el minuto 13, pero en líneas generales el equipo no pudo superar la intensa defensa txuri urdin.

El Barça, perdido sin Lamine Yamal

Sin ningún tipo de duda, fue una de las peores noches del Barça de Flick. Tanto es así que es la primera vez que no encuentra la vía del gol en toda la temporada. Hasta ahora, el equipo blaugrana era un vendaval ofensivo, pero en Anoeta se encalló. Y una de las causas de esta sequía ofensiva fue la ausencia de Lamine Yamal. El jugador formado en la Masia fue baja de última hora después de arrastrar unas molestias por una fuerte contusión sufrida en el tobillo derecho ocasionada durante el pasado partido de Champions League disputado en Belgrado contra el Estrella Roja.

Sin Lamine Yamal en el campo, la producción ofensiva del Barça baja. Se vio en el campo del Osasuna y se ha comprobado en Anoeta. La magia del jugador formado en la Masia es el faro del tridente más en forma de Europa. Y es que tanto Raphinha como Lewandowski se han nutrido de las infinitas ocasiones que ha generado el '19' culé desde principio de temporada. Lamine tiene una habilidad innata para generar oportunidades de la nada. Aunque el equipo no esté encontrando ocasiones, él se las ingenia para desestabilizar la defensa rival. Además, su mera presencia ya genera respeto en el equipo rival. Contra el Bayern, su destreza para evitar presiones rivales fue clave para calmar el partido y recuperar el dominio.

Fermín López, desaparecido en el rol de Lamine Yamal

Contra la Real Sociedad, el encargado de ocupar la banda derecha fue Fermín López, pisando posiciones más interiores que Lamine Yamal. Esta fórmula no funcionó: Fermín no supo atacar el espacio a espaldas del lateral de la Real Sociedad y las sociedades que conformó en banda no fueron productivas. Además, la conexión con Jules Kounde en el lado derecho no fue tampoco demasiado fluida, como sí que sucede con Lamine.

Fermín López, decepcionado durante el Real Sociedad - Barça / Foto: Europa Press
Fermín López, decepcionado durante el Real Sociedad - Barça / Foto: Europa Press

En la segunda parte entró Dani Olmo, que con su talento y frescura dio una nueva cara al ataque barcelonés, pero fue insuficiente para poder perforar la portería defendida por Remiro. Así pues, el equipo de Hansi Flick encontró mucho en falta a un Lamine Yamal que podría saltarse el parón de selecciones para descansar en Barcelona. La última palabra será de Luis de la Fuente.