Uno de los jugadores del Barça que ha defraudado más en el primer tramo de la temporada ha sido Robert Lewandowski. El delantero polaco, que en el inicio del curso pasado sorprendió a todos con un rendimiento espectacular, cayó en picado después del Mundial de Qatar, aunque en el Barça consideraron que volvería a su nivel después del verano. La realidad, sin embargo, es que Lewandowski no está mostrando su mejor versión. Participa mucho menos en el juego y, lo que es peor, está viendo poco las porterías rivales.
El Barça no ha querido esperar menos y ha cerrado la llegada de Vitor Roque para este mercado de invierno, competencia para Lewandowski. El brasileño debe adaptarse al fútbol europeo, aunque la gran esperanza del Barça es que Vitor Roque caiga de pie, lo que pondría en su serio problema a Robert Lewandowski.
Lewandowski, de más a menos
El gran problema del Barça es que Lewandowski tiene contrato hasta el 2026, a lo que se añade que su contrato es ascendente, por lo que cada temporada que pasa ve como su ficha aumenta, lo que perjudica gravemente la masa salarial del Barça. El club blaugrana aceptó las condiciones del delantero polaco, pero a cambio añadió una cláusula con la que podría cortar a Lewandowski de forma unilateral, por si el rendimiento del delantero no era el esperado.
Tal y como adelantó la Cadena Ser, en el contrato de Lewandowski hay una cláusula liberatoria según la cual el Barça podrá rescindir el vínculo con el delantero de forma unilateral el verano que viene y el del 2025. Para ello, Lewandowski debería disputar menos del 55% de los partidos oficiales del equipo.
La cláusula liberatoria del Barça para echar a Lewandowski
A pesar de que para este verano parece complicado que Lewandowski dispute menos del 55% de los partidos, ya que es titular indiscutible, si el delantero no mejora y si Vitor Roque explota, el Barça hará todo lo posible para rescindirle su contrato, ya que el salario que tendrá será muy elevado, de 16 millones de euros. Si Lewandowski vuelve a brillar, en el club considerarán quedárselo una temporada más, aunque seguirá peinando el mercado en busca de un delantero de nivel que pueda sustituir al polaco.
El gran problema es que Lewandowski no tiene la más mínima intención de moverse de Barcelona hasta el 2026. El delantero está encantado en la ciudad, así como también su mujer, Anna Lewandoska, que recientemente anunció que está preparando varios negocios en Barcelona, donde quiere seguir viviendo durante muchos años.