Nueva vida para el Barça. Los blaugrana han derrotado al Valencia (3-1) gracias al acierto de Ansu Fati, Memphis Depay y Coutinho y suben posiciones en la clasificación cuando más lo necesitaban. Los culés recuperan las buenas sensaciones en una semana clave con los compromisos de Champions, delante el Dinamo de Kiev, y el trascendental Clásico contra el Real Madrid.
Cuando todo hacía prever que el duelo contra el Valencia sería el de una nueva era, el presidente Joan Laporta sorprendió a todo el mundo ratificando a Ronald Koeman antes de disputar el partido contra el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano. Dos semanas después, parece que haya pasado una eternidad.
Necesidad de sumar los tres puntos
El Barça tenía la necesidad de sumar los tres puntos este domingo. Primero por la exigencia de subir posiciones en la clasificación y después para recuperar las buenas sensaciones y el camino de la victoria. La previa venía con ciertas novedades y algunas incógnitas que Koeman se ha encargado de resolver. Ansu Fati merece ya ser titular y a Gavi ya no lo sacan de los once escogidos.
Después de dos titularidades consecutivas con la selección española de Luis Enrique, semifinales y final de la Nations League, el andaluz sigue acumulando experiencia en Primera División y su irrupción es, sin duda, la gran revelación de la temporada. Koeman tuvo la valentía de apostar por él, y Luis Enrique le dio el empuje necesario para ser la gran sensación.
La visita de esta jornada no era nada sencilla y más después que esta temporada tengan a un referente en el banquillo como Bordalás. El planteamiento de Koeman ha sido acertado y ha demostrado que ha funcionado, aunque el inicio ha sido lo peor. Gayà ha abierto la lata en los primeros compases del partido, pero los culés no querían ir por detrás en el marcador y enseguida han puesto las tablas. Ansu Fati, la gran esperanza del barcelonismo, ha marcado un golazo para hacer vibrar el Estadi.
Con una Asamblea previa aplazada
Un Camp Nou que necesita una remodelación urgente, pero que es "seguro". Así lo han asegurado la junta actual después de saber que en la época de Bartomeu se disputaron 21 partidos en los que había riesgo para los socios por problemas estructurales. Y hablando de la actualidad de club, antes del partido ante los valencianos, se ha celebrado la Asamblea General Ordinaria, pero se ha tenido que aplazar porque se han alargado en las exposiciones y en las explicaciones. El Espai Barça y la reforma de los Estatutos, los dos puntos clave de la jornada, no se han podido votar.
Además, el de hoy ha sido un partido especial porque ha sido el primero sin restricciones de público y la cifra de 47.000 personas, todavía lejos de las cifras antes de la pandemia, pero un récord en estos tiempos. El ambiente ha sido muy bueno en ciertos momentos y se han vuelto a escuchar con el cuarto gol de Memphis Depay de la temporada. El neerlandés no ha fallado desde los once metros después de una falta clara a Ansu.
El Barça ha seguido dominando en la segunda parte, pero los valencianos han tenido alguna ocasión para volver a empatar. Es aquí donde Ter Stegen ha sido clave y se ha convertido en un muro. Al final, los culés han hecho una buena gestión del tiempo y se han animado con una tercera diana. Sergiño Dest, que ha hecho uno de sus mejores partidos, ha hecho una magnífica asistencia a Coutinho, que no ha fallado delante de Cillessen. Y para acabar de redondear la fiesta, debut del Kun Agüero para cerrar una gran noche. Los catalanes cargan las pilas para una de las semanas más importantes y con la vista puesta en el eterno rival.