Miércoles movido judicialmente en el entorno el Barça. Noelia Romero, la excompliance officer del club blaugrana, ha declarado en el juzgado de instrucción número 13 de Barcelona como testigo de la investigación del Barçagate, el caso de las redes sociales. Precisamente, Romero fue despedida del Barça hace unas semanas, después de ya haber estado suspendida de empleo y sueldo.

La declaración llega dentro de la fase de instrucción después que el juzgado admitiera a trámite una querella presentada el pasado mes de abril por un grupo de 8 socios de la asociación Dignitat Blaugrana. A principios de este mes los Mossos d'Esquadra ya se personaron en el Camp Nou para recoger información sobre el caso y llevarse la auditoría de Price Waterhouse Coopers (PwC), que ya no veía claro el fraccionamiento de los contratos, por orden judicial.

Finalmente, la jueza ha decretado secreto de sumario de todos los documentos, entre los cuales se encuentra la auditoría, mientras dure la investigación. Por este motivo ahora el Barça ya no dejará ver a ningún socio la auditoría de PwC, con el escudo judicial que les avala.

Josep Maria Bartomeu señalando

Víctor Font vuelve a pedir ver la auditoría

También esta tarde, justo antes de decretarse el secreto de sumario, Víctor Font, candidato a la presidencia del Barça, había vuelto a hacer una petición al Barça para tener acceso a la auditoría. Una segunda petición para reforzar la de hace unos días que ya fue denegada por parte del club, cuando todavía no estaba bajo secreto de sumario.