Con su ajustado triunfo contra el Virtus Bolonya en el Palau Blaugrana, el Barça ha acabado la fase regular de la Euroliga en quinta posición y se enfrentará en el play-off contra el Mónaco, que ha sido el cuarto clasificado. Objetivo cumplido para los de Joan Peñarroya después de hacer muchos cálculos en los últimos días, pero confirmándose una de las mejores noticias con esta clasificación directa para la ronda previa de la Final Four.

Una situación muy buena para el Barça, pero complicada para el Real Madrid. Aunque el conjunto merengue ha acabado con las mismas victorias que los culés, el Real Madrid ha acabado en séptima posición y tendrá que jugar el play-in contra el París Basketball.

Las mejores noticias para el Barça

El equipo catalán ha conseguido la mejor posición a la que aspiraba después de derrotar al rival italiano por 91-87 y beneficiarse de la derrota del Zalgiris contra el Anadolu Efes en Estambul (87-77). Por esto ya sabe que ahora se enfrentará por una plaza en la Final Four contra el Mónaco, al que ya ha ganado esta temporada en las dos ocasiones en las que se han enfrentado.

Por lo tanto, muy buenas sensaciones para los blaugrana, que saben que lo tienen todo de cara para llegar a la tan esperada fase final de la competición. Y se ha sufrido hasta el final, ya que la victoria no era suficiente para conseguir este billete.

Nuevo tropiezo para el Real Madrid

Por su parte, el Real Madrid, que después de su triunfo del jueves contra el Partizan podía quedar del quinto al séptimo lugar, dependía de otros resultados. Y con las victorias del Barça y del Anadolu Efes se ha quedado fuera del play-off y se tendrá que jugar su futuro en la repesca (play-in). Su rival será el París Basketball, al que ganó en su pista y también en la capital francesa en la fase regular.

Por lo tanto, también esperanzas del Real Madrid, pero que tendrá que jugar entre uno y dos partidos para llegar al play-off. El equipo de Chus Mateo será séptimo y se enfrentará al Fenerbahçe, el segundo, en caso de victoria, pero si pierde se jugará la octava plaza en casa ante el ganador de la eliminatoria Bayern-Estrella Roja. Y quien la supere tendrá como rival al Olympiakos, el primer clasificado de la fase regular.

Una Euroliga que este año sí que se ha puesto emocionante, con muchas opciones para muchos equipos, y también sabiendo que los partidos a cara o cruz son impredecibles. Y en esta fase final puede pasar de todo.