Si el Barça ya no levanta cabeza este domingo contra el Levante en el Camp Nou (21.00h / Movistar Partidazo), el único objetivo por el cual podrán luchar será para intentar clasificarse para la Champions League. Después del último desastre europeo contra la Juventus y de la pena que hizo al equipo contra el Cádiz, toca nueva prueba de fuego en la Liga Santander.

Parece que dentro del vestuario culé hay tranquilidad, quizás un poco de preocupación, pero si tenemos que hacer caso a Ronald Koeman y a sus ruedas de prensa, todo llegará y los buenos resultados y el buen juego también. Ya veremos si cuando llegue es demasiado tarde o todavía se puede ganar algún título esta temporada y que la vitrina no vuelva a quedar en blanco como pasó en la pasada.

Un Barça necesitado

El Barça se encuentra en la zona media de tabla con sólo 14 puntos de 30 posibles. Menos de la mitad. Y suerte que en casa no le van tan mal las cosas. Sin marcar tantos goles como en otros años y encajando como siempre. Aparte de las lesiones, la plantilla no acaba de entender a qué quiere jugar Koeman.

Ronald Koeman durante un partido del Barça / EFE

De la ilusión inicial se pasó a la irregularidad constante. Pero es que ahora ya se ha llegado a un límite inesperado en can Barça en el cual una derrota ya no es una sorpresa. También afectan las bajas de Ansu Fati, de Gerard Piqué o de Sergi Roberto. Aparte de la intermitencia de Dembélé y de jugadores dentro del equipo que aportan poco por no decir nada. Hace falta un punto más de exigencia y de actitud para llegar al nivel que se exige en el Barça.

Es cierto que uno de ellos es Leo Messi, que no está al nivel esperado, pero seguramente es quien menos culpa tiene de esta situación. El nivel mostrado del resto de sus compañeros está muy por debajo de las expectativas.

Las últimas dos derrotas, que han llegado de manera consecutiva en dos competiciones diferentes, es la mejor expresión de un Barça decadente y que no encuentra la tecla para volver a alzar la cabeza.

Messi después de un gol contra la Juventus / EFE

El Levante, un rival también necesitado

Ahora bien, tendrán que sobreponerse al menos contra el Levante este domingo. Los valencianos precisamente no están haciendo un gran inicio de temporada. Decimoctavos en la Liga (en zona de descenso) y con 11 puntos (3 menos que el Barça), no pueden estar contentos de su año.

Aunque llevan seis partidos consecutivos sin perder, se están acostumbrando a empatar más de lo deseado. Y tampoco han conseguido puntos contra los grandes equipos de la Liga. Una victoria en el último partido contra el Getafe es el gran aval y la gran esperanza de un Levante más que necesitado.

 

Imagen principal: Messi mirando al suelo después de una nueva derrota del Barça / EFE