El Barça ya ha hecho oficial el informe médico de Marc-André Ter Stegen. El portero blaugrana tuvo que ser sustituido en el último minuto de la primera parte después de una mala caída a la salida de un córner, y las primeras hipótesis apuntaban a una rotura del tendón rotuliano de su rodilla derecha. Y los pronósticos eran acertados. El alemán se perderá toda la temporada, con un proceso de rehabilitación que irá entre los 7 y los 9 meses, dependiendo de la evolución del jugador.
Una victoria para 1-5 en una visita tan complicada como es Villarreal tendría que ser motivo de gozo. Y lo es, claro. Pero en Barcelona no hay nadie de fiesta. Más bien, todo lo contrario. Y es que si el partido de ayer ya nos dejó con la preocupación en el cuerpo, este lunes y nos hemos levantado con la noticia que todo el mundo esperaba, pero que nadie quería aceptar. Ter Stegen ya ha sido operado, tal y como ha comunicado el club. "Ter Stegen ha sido intervenido de forma satisfactoria de la lesión en el tendón rotuliano de la rodilla derecha por el doctor Joan Carles Monllau con la supervisión de los Servicios Médicos. Es baja y su evolución marcará su disponibilidad", ha informado el Barça
𝐂𝐎𝐌𝐔𝐍𝐈𝐂𝐀𝐓 𝐌𝐄̀𝐃𝐈𝐂
— FC Barcelona (@FCBarcelona_cat) September 23, 2024
Marc ter Stegen ha estat intervingut de manera satisfactòria de la lesió al tendó rotulià del genoll dret pel doctor Joan Carles Monllau amb la supervisió dels Serveis Mèdics del Club. És baixa i la seva evolució en marcarà la disponibilitat. pic.twitter.com/GjjW3M28gc
¿Qué es el tendón rotuliano?
Ter Stegen tiene precedentes con esta misma lesión. Hace 4 años, a pesar de no romperse el tendón, tuvo que operarse. Las molestias eran crónicas y el tratamiento conservador no le funcionaba, así que decidió pasar por quirófano para arreglarlo de una vez por todas. Sin embargo, la importancia de la lesión entonces no se acerca al alcance de esta. Ahora, el tendón ha cedido por completo, y tanto la operación como la rehabilitación piden muchos más esfuerzos y tiempo.
El tendón rotuliano es una pieza fundamental de la rodilla. Cuando este se rompe o deja de funcionar, el sistema de extensión falla y se pierde toda la movilidad. Además, esta lesión es conocida por su largo proceso de recuperación, porque el jugador tiene que volver a ganar la capacidad de flexionar la pierna y conseguir la capacidad muscular que perderá en los próximos meses.
La mala suerte vuelve a actuar
La lesión se produjo en una jugada desafortunada. El alemán saltó para atrapar la pelota con las manos a la salida de un córner, como tantos miles de veces ha hecho a lo largo de su carrera. En la caída, un pequeño desequilibrio al tocar con Yeremy Pino, no pudo apoyar la pierna como él esperaba. La rodilla cedió y provocó una luxación de rótula que se llevó por delante el tendón.
Los gritos de dolor de Ter Stegen y la preocupación de todos los jugadores, tanto del Barça como del Villarreal, auguraba una lesión grave, de larga duración. Las asistencias médicas se lo llevaron rápidamente para hacer el diagnóstico y empezar el tratamiento. El portero blaugrana ya ha pasado por el quirófano y ha empezado la cuenta atrás para poder volver a ver al capitán en acción.