El Inter de Miami sigue añadiendo refuerzos estelares de viejas glorias de Europa, que han provocado que sea uno de los equipos más seguidos del fútbol mundial. Porque pueden presumir de tener al jugador más laureado de la historia en sus filas, como es Leo Messi. David Beckham consiguió convencer al astro argentino para que abandonara el Paris Saint-Germain en junio, cuando finalizaba su contrato, y aterrizara en la Major League Soccer.
De este modo, logró que la liga profesional de fútbol de Estados Unidos tenga la repercusión que llevaba tanto tiempo buscando. Y para contentar al ocho veces ganador del Balón de Oro, y hacer que se olvidara de su posible regreso al Barça, le rodeó de dos de sus mejores amigos, Sergio Busquets y Jordi Alba, que precisamente dejaron el Camp Nou para trasladarse al continente norteamericano. Y para completar el equipo, contrató a Gerardo ‘el Tata’ Martino como nuevo técnico.
Pero esto no es todo. Hace solamente unos pocos días, de nuevo anunciar un nuevo ‘bombazo’, como fue la llegada de otra leyenda culé, a la cual ya habían tanteado en el mercado estival. Hablamos de Luis Suárez, que quiso dejar Gremio de Porto Alegre en agosto, para reencontrarse con sus antiguos compañeros, pero se vio obligado a cumplir con el contrato que tenía firmado, y que expira el uno de enero. Y próximamente puede añadirse un nuevo fichaje.
Messi no se conforma, y ha solicitado a Beckham la llegada de un compatriota con el cual mantiene una excelente relación, y que cree que ayudaría a mejorar el nivel competitivo de la franquicia, que sin duda es la gran favorita para conquistar el título de liga por primera vez en su historia, desde que se fundó en 2019. El nombre que Leo ha colocado sobre la mesa es el de Marcos Rojo, que actualmente defiende los colores de Boca Juniors, donde es el capitán.
Puede ser la siguiente estrella en aterrizar en Miami, y pasar a estar a las órdenes de Martino.
Rojo, encantado con la idea de llegar al Inter
Rojo todavía tiene firmado por 12 meses más en La Bombonera, pero se ha mostrado muy seducido con la posibilidad de reforzar al Inter, y compartir vestuario de nuevo con Messi, con el cual coincidió durante muchos años en la selección de Argentina.
A sus 33 años, el ex de Manchester United, Sporting de Portugal, Spartak de Moscú y Estudiantes de la Plata puede emprender un nuevo reto.