Jude Bellingham se cobrará víctimas en el Real Madrid. Porque Carlo Ancelotti tendrá que encontrar la manera de dar entrada en el once inicial al fichaje estrella que han realizado este verano, a la espera de conocerse qué ocurre finalmente con Kylian Mbappé. Si Florentino Pérez ha pagado más de 100 millones de euros por el internacional inglés será, lógicamente, para que forme parte del equipo titular, y no para tenerlo en el banquillo.
Ha convertido al mediocentro de 19 años en uno de los traspasos más caros de la historia, debido a que entre fijos y variables, la operación llegará a los 130 ‘kilos’. La competencia en la medular es muy grande, con cracks como Dani Ceballos, Toni Kroos, Aurelien Tchouaméni, Eduardo Camavinga o Fede Valverde, pero nadie tiene dudas de que el ex del Birmingham City será intocable. Aunque primero deberá de convencer con las actuaciones que realice.
Tendrá que demostrar el impresionante nivel que exhibió durante las tres campañas que pasó por el Borussia Dortmund, y que le han llevado a ser considerado como uno de los mejores del planeta. En el Santiago Bernabéu esperan impacientes por poder ver a su nueva estrella en acción, y confían en que la aclimatación a La Liga Santander sea rápida y sencilla. Porque en la Bundesliga tuvo un impacto inmediato, y no hubo que esperar mucho tiempo para que explotara su potencial.
Bellingham está muy motivado con el desafío que ha asumido, y se convertirá en el verdugo de Luka Modric. El ‘10’ será el principal perjudicado por el aterrizaje del ‘5’, y deberá de asumir un rol mucho menos protagonista. Evidentemente, todavía dispondrá de minutos y de continuidad, ya que sigue contando con la confianza absoluta de Ancelotti. Pero se verá obligado a dar un paso al lado, y será suplente en las grandes citas, a priori.
No pueden seguir dependiendo de un futbolista que ya tiene 37 años, que serán 38 en el mes de septiembre, y que en algunos momentos del curso ha demostrado estar físicamente lejos de su mejor momento.
Modric acepta sin rechistar
La primera persona que comprende totalmente que es momento para dejar espacio a las nuevas joyas que lleguen al Madrid es Modric. Entiende la reconstrucción que está realizando Florentino Pérez, y ha aceptado sin rechistar que dejará de ser titular.
Fue una de las condiciones que el presidente impuso para ofrecerle el nuevo contrato que firmó, y que se extiende hasta 2024.