A pesar del éxito reciente con la consecución del doblete, en el Real Madrid ya están inmersos en los planes de la próxima temporada. Florentino Pérez trabaja en altas y bajas que se perfilan como movimientos estratégicos clave. Entre los posibles salientes figura Andriy Lunin, cuyo contrato expira en 2025 y ahora se debate entre continuar o explorar nuevas opciones.
El portero ucraniano fue figura crucial en la conquista de la Decimoquinta, destacando especialmente en la semifinal contra el Bayern de Múnich y en la tanda de penaltis ante el Manchester City. Aunque comenzó la temporada como suplente primero de Courtois y después de Kepa, las destacadas actuaciones bajo la dirección de Carlo Ancelotti aseguraron un lugar en el once titular y en la memoria de los aficionados madridistas.
Lunin no quiere volver a la suplencia permanente
Pero el futuro de Lunin en el Bernabéu depende ahora de la titularidad de Courtois. Si el belga mantiene su forma y evita lesiones, el ucraniano verá limitadas de nuevo sus oportunidade y volverá a la casilla de salida.
El Real Madrid tiene mucho interés por renovar su contrato hasta 2029. Le ven como una apuesta de futuro para la portería madridista. Pero Lunin prioriza los minutos de juego, una garantía que el club no puede asegurarle a largo plazo. Es consciente de que Courtois es intocable. Pero si al menos le asegurasen la titularidad en alguna competición, se plantearía seguir. Algo que no ocurrirá ante la tesitura actual. Así las cosas, prefiere asegurarse minutos fuera del Santiago Bernabéu.
El Newcastle pone 30 millones sobre la mesa por Lunin
Ante este escenario, el Newcastle ha irrumpido con una oferta tentadora de hasta 30 millones de euros por Lunin, tal y como adelantan algunos medios ingleses, además de una propuesta salarial que refleja su calidad y proyección. Esta oferta no solo representa una salida financiera atractiva para el Real Madrid, sino también una oportunidad para el portero de asegurar un rol protagónico en la Premier League.
Florentino Pérez se enfrenta ahora a una encrucijada: retener a Lunin para tener un efectivo de garantías en la portería en caso de problemas con Courtois, o aceptar una oferta que no solo beneficia económicamente al club, sino que también satisface las ambiciones del jugador. La oferta del Newcastle parece ser tan seductora que ni el presidente merengue puede permitirse rechazarla sin considerar las repercusiones deportivas y financieras a largo plazo.