En la Bundesliga hay una gran cantidad de delanteros interesantes. Obviamente, todas las miradas se van a Erling Braut Haaland y a Robert Lewandowski, que son los dos grandes exponentes. El primero está teniendo problemas con las lesiones, que le han impedido tener la continuidad que le gustaría, pero aún y así sus cifras son escandalosas. Tiene el gol en las venas, y lo mejor de todo es que solamente tiene 21 años. Es el presente y el futuro.
El polaco, por su parte, es la gran estrella del Bayern de Múnich, y no se cansa de batir récords. Parece que mejora a cada temporada que pasa, y para muchos es el merecido Balón de Oro, por delante de Leo Messi, que fue quien se lo acabó llevando. Los dos protagonizan uno de los duelos más apasionantes que se recuerdan en mucho tiempo, y en cada partido que se enfrentan lucen sus increíbles condiciones. La pelea por acabar como el máximo goleador de la liga alemana será interesante.
No obstante, hay otro crack que también tiene posibilidades de acabar siendo el ganador. Y es que el curso que está haciendo Patrick Schick es digno de elogio, y acumula la friolera de 17 goles y tres asistencias en 19 partidos, sumando todas las competiciones. Al fin ha explotado todo su potencial, y se ha convertido en la referencia ofensiva del Bayer Leverkusen. Sin duda, la brillante Eurocopa que protagonizó el pasado verano le ha cambiado la vida.
Venía de unas temporadas muy irregulares, y no había conseguido brillar especialmente ni en la AS Roma ni en el RB Leipzig. Por suerte, en el BayArena ha encontrado su sitio, y, a sus 25 años, ha llamado la atención de grandes clubes de Europa. Entre ellos, se coloca al Barça o al Real Madrid, que siguen atentamente al internacional con la selección de la República Checa. Sobre todo, Joan Laporta, que busca a un goleador a la desesperada.
El ex de la Sampdoria o el Sparta Praga era uno de los nombres que manejaba, y valoraban seriamente la posibilidad de lanzarse a por él. Eso si, sabían perfectamente que su coste sería bastante elevado, y superaría los 60 millones de euros.
Mohammed Bin Salmán toma ventaja
Un precio que pocos pueden pagar, y que en el Camp Nou no acababan de ver muy claro si merecía le pena. Menos dudas parece tener el Newcastle United, que se ha marcado a Schick como objetivo prioritario, y quiere asegurarse su llegada este mismo mes de enero.
Mohammed Bin Salmán lo quiere a toda costa, y espera adelantarse a Barça, Madrid y el resto de interesados. Los ‘aspirineros’ no quieren perderle a mitad de curso, pero, ante una oferta así, tendrán que pensárselo dos veces.
El futuro del atacante de 191 centímetros apunta a la Premier League.