Mohamed bin Salmán, el flamante y multimillonario nuevo propietario del Newcastle, está convencido de crear un equipo campeón en un tiempo récord. Para ello no va a escatimar en gastos, pero tampoco se va a permitir ningún fallo, por lo que su equipo de trabajo está analizando todo el mercado mundial en busca de los fichajes adecuados.
Como era de esperar, día tras día salen en la prensa inglesa nombres de posibles fichajes, de Lingard y Dele Alli a Icardi y Hugo Lloris, y la lista se irá alargando hasta que llegue el verano, cuando el Newcastle lleve a cabo la primera gran fase de su remodelación. En Inglaterra, de hecho, los clubes de la Premier League han mostrado su preocupación, pues la entrada de Bin Salmán puede provocar una auténtica revolución.
El Newcastle no quiere a Coutinho
Uno de los nombres que sonaron con fuerza en los primeros días tras la compra del Newcastle fue el de Philippe Coutinho, pues sus representantes lo están ofreciendo en Inglaterra y veían al club del norte de Inglaterra como un destino ideal, pues tiene la capacidad económica para mantener la elevada ficha del jugador.
El problema es que Bin Salmán no está interesado en el jugador brasileño, que en poco tiempo ha pasado de ser uno de los mejores futbolistas del mundo a tener enormes dificultades para que algún club de nivel asuma el reto de apostar por él. El Newcastle contempló su fichaje, pero la conclusión es que sería un riesgo demasiado elevado en un momento en el cual los grandes fichajes deben ser garantía de éxito.
Dembélé, tentado por el Newcastle
El Newcastle, sin embargo, tiene en mente a otro jugador del Barça, por el cual sí que estaría dispuesto a asumir el riesgo, tanto porque termina contrato como porque por edad todavía puede explotar definitivamente, y más en un fútbol tan vertical como es el inglés.
Y es que tal y como aseguran este miércoles en Inglaterra, el Newcastle se ha puesto en contacto con los representantes de Ousmane Dembélé para conocer sus intenciones de futuro. El extremo francés, que sigue sin renovar su contrato con el Barça, podría cambiar de aires con una suculenta prima de fichaje y una ficha más alta que la que percibe en el Camp Nou, además de salir de un club en el cual nunca llegó a cuajar. El único problema para Dembélé es que el Barça ya ha insinuado al entorno del jugador que su participación esta temporada será testimonial si se niega a renovar, pues lo que no hará el club es promocionar su futuro fichaje a coste cero por otro equipo.