El deporte, y más el de primer nivel, es un mundo en el cual la exigencia es máxima y cada vez los deportistas están más expuestos. Siempre hay presión, pero sobre todo aparece muy pronto en los deportistas que despuntan cuando todavía son muy jóvenes y se les pide rendimiento inmediato y una progresión que muchas veces no es posible. Por eso se producen casos de estrés máximo y deportistas que acaban con su carrera deportiva por culpa de problemas de salud mental.
En este sentido, Bojan Krkic, exjugador del Barça, del Milan, de la Roma, del Ajax o del Vissel Kobe, entre otros, ahora formando parte de la estructura de fútbol blaugrana, ha sufrido problemas de salud mental a lo largo de su carrera. Bojan, de 33 años y ya retirado del fútbol, ha presentado su documental producido por Rakuten TV con título 'Bojan, más allá de la sonrisa'. En el metraje explica los miedos y las inseguridades de un joven jugador que estaba llamado a ser una estrella mundial.
Los problemas de Bojan e Iniesta: ansiedad y depresión
Bojan Krkic tuvo ansiedad durante su etapa en el Barça, cosa que no se conocía dentro del vestuario. Un problema que el mismo exjugador culé confiesa que "lo viví con mucho hermetismo". "Creo que ningún compañero era consciente de lo que se me pasaba", ha afirmado sobre su problema de salud mental.
Todavía siguiendo con el fútbol y el Barça, se puede recordar el caso de Andrés Iniesta, que confesó que pasó por una depresión durante su etapa en el club blaugrana. Todo empezó tras la repentina muerte de su amigo Dani Jarque en el 2009, sintiéndose muy triste y fuera de lugar en todo momento. Iniesta llegó a explicar que "deseaba que llegara la noche para tomarme la pastilla y descansar".
Otros deportistas que han sufrido problemas de salud mental
Pero no solo ellos son casos destacados de deportistas que han tenido problemas de salud mental. Uno de los más sonados fue el de Simone Biles, gimnasta estadounidense y ganadora de 37 medallas entre Juegos Olímpicos y campeonatos mundiales, que tuvo que retirarse del deporte por un tiempo. "Ya no confío en mí. Tengo que proteger la mente", afirmaba en su día. Naomi Osaka, tenista japonesa, también se retiró temporalmente del deporte por problemas de salud mental: "Nunca haría broma sobre una cosa tan seria como la salud mental porque he sufrido depresiones desde el US Open del 2018".
Hace unos meses Ricky Rubio tuvo que anunciar que dejaba el baloncesto de manera temporal para priorizar su salud mental. Y entonces renunció al pasado Mundial de baloncesto. Un caso similar al del actual jugador del Barça Àlex Abrines, que cuando jugaba en la NBA sufrió depresión y ansiedad. También nadadores como Michael Phelps o el español Rafa Muñoz, que tuvieron problemas para seguir compitiendo con garantías.
Queda claro, pues, que el mundo del deporte es muy exigente y que la presión que reciben los deportistas de élite muchas veces acaba afectando directamente a la persona. Y por eso es tan necesario trabajar la salud mental en el deporte, pero también fuera de él.