La Premier League impulsaba este pasado fin de semana una campaña en señal de apoyo al colectivo LGTBIQ+, pero como, desgraciadamente, era de esperar, esta se ha convertido en una de las grandes polémicas de la jornada en el mundo del fútbol. Y es que no es la primera vez que el simple hecho de lucir la bandera del Arco Iris genera controversia en el mundo del fútbol, tomando como principal referencia el pasado Mundial de Qatar. Sea como sea, en este caso, la liga inglesa impulsaba que, durante la Jornada 13, los capitanes de sus equipos lucieran la insignia LGTBIQ+ en los denominados Rainbow Laces.
19 de los 20 capitanes de la Premier League se enfundaron el brazalete, pero Sam Morsy, capitán del Ipswich Town, se negó a hacerlo. El futbolista egipcio, por razones religiosas, dijo no a la campaña como musulmán practicante. Por su parte, quien también lo lució, pero sin quedar exento de polémica, fue el capitán del Crystal Palace, Marc Guéhi. El internacional inglés lo llevó durante el partido de los eagles contra el Newcastle, pero lo hizo escribiendo sobre el distintivo "I love Jesus".
Marc Guéhi podría enfrentarse a una sanción por compartir un mensaje religioso en la equipación
Guéhi, como creyente de la religión cristiana, quiso dejar claro que la campaña de la Premier League nada tenía que ver con un cambio en su fe, y es que hay que recordar que la iglesia siempre ha condenado la homosexualidad. Sea como sea, la redacción de un mensaje de carácter religioso sobre el brazalete que utilizó le puede comportar una sanción.
Según reza el reglamento desde que estallara la polémica en el Mundial de Qatar, "las equipaciones no pueden llevar ningún mensaje político, religioso o un eslogan personal". En este caso, Guéhi lo hacía compartiendo un mensaje religioso y, con el reglamento en la mano, le caería una sanción.
La senyera y la ikurriña, dos excepciones
Según la regla 4.2 de la IFAB, "el capitán del equipo llevará el brazalete que decrete o autorice el organizador de competiciones pertinente, o bien un brazalete de un solo color que también puede incorporar la palabra capitán, o bien la letra C o una traducción a otro idioma, que también será de un único color". En el caso de LaLiga EA Sports, la senyera y la ikurriña, dos banderas que han cobrado un significado político, son permitidas porque el pasado mes de julio se decretó un condicionante que permite este tipo de mensajes si el organizador de competiciones lo permite.