Una de las posiciones que el Real Madrid quiere reforzar de cara a la próxima temporada es la del eje central. Militao y Alaba han formado una gran dupla durante todo el curso, pero cuando uno de los dos ha faltado ha habido problemas. Nacho cumple, pero poco más, mientras que Vallejo sigue sin convencer, por lo que la temporada que viene no seguirá en la disciplina del conjunto blanco.
El objetivo del Real Madrid es fichar un central de nivel y con experiencia, con Antonio Rüdiger como favorito, y además añadir otro central, joven y con proyección. Y para este último perfil, el elegido es Víctor Chust, defensa del Madrid cedido en el Cádiz por el que ya se ha interesado el Manchester City. Ancelotti ve bien la operación, pues ganaría fondo de armario en una posición muy delicada.
El Manchester City ya preguntó por él
Tras una primera vuelta en la que jugó muy poco, todo cambió para Víctor Chust tras la llegada de Sergio González al banquillo del Cádiz. El nuevo entrenador apostó por el valenciano, que con solo 22 años mostró su sangre fría al liderar la zaga gaditana, con una calidad para sacar el balón desde atrás fuera de toda duda. Chust acumula ya 24 partidos con el Cádiz, 20 de Liga y 4 de la Copa del Rey, y con una progresión constante.
El hecho de que termine contrato el 30 de junio hizo que el Cádiz le transmitiera su objetivo de quedárselo en propiedad, y poco después fue el Manchester City el que se interesó por hacerse con sus servicios. Y ha sido entonces cuando ha aparecido el Real Madrid, que tiene la intención de renovar al jugador. Chust prioriza la opción de poder seguir en el Madrid, pues su sueño es el de triunfar en su club de formación.
Casi media vida en el Real Madrid
Tras empezar su formación en el Valencia, Víctor Chust llegó al Real Madrid en el 2010, con solo 12 años, y su nombre empezó a sonar con fuerza en el 2020, cuando formó parte del Madrid que ganó la Youth League con Raúl González en el banquillo. De hecho, Chust llegó a debutar con el primer equipo, en el Alcoyano-Real Madrid de la Copa del Rey de la temporada pasada en la que el equipo de Zidane cayó eliminado.
Como tantos otros jóvenes talentos, su sueño se vio roto al tener que pasar al primer equipo, por lo que no le quedó más remedio que irse cedido al Cádiz. Empezó jugando poco, pero con el paso de las semanas fue demostrando su gran nivel. Parece que el Santiago Bernabéu está cada vez más cerca.