El Barça tiene por delante un verano que se presume movido. Tras completar un año en blanco sin poder competir ni por la Liga ni por la Champions League y apostar por Hansi Flick como recambio de Xavi Hernández, la secretaría técnica liderada por Deco tiene el objetivo de reconstruir un proyecto que debe aspirar de nuevo a ser uno de los mejores equipos de Europa. Para hacerlo, deberá fichar a varios jugadores que ayuden a reforzar aquellas posiciones que más dudas han generado a lo largo del último curso.
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Aparece una nueva solución para el Barça en el centro del campo
En este sentido, el área deportiva del Barça ha señalado dos prioridades: un pivote defensivo de primer nivel y un extremo izquierdo con mucho desborde. Antes de pensar en estos fichajes, deberá cerrar la carpeta de salidas, para regresar a la norma del 1:1 del fair play financiero, pero esto no quita que ya hayan empezado a sonar los primeros nombres para ocupar esta posición. En el caso del extremo izquierdo hay un candidato claro: Nico Williams, un jugador que está siendo uno de los mejores delanteros de la Eurocopa, que reúne todas las características que exige Flick para sus extremos y que tiene una cláusula de 58 millones de euros, una cifra no demasiado disparada.
Ahora bien, en el centro del campo existen más dudas, tanto en cuanto a nombres como perfiles. Las opciones que tiene el Barça encima de la mesa son muchas, pero en las últimas horas han aparecido nuevos rumores que colocan a Adrien Rabiot de nuevo en el radar de la entidad blaugrana. Según ha recogido el portal digital Madrid-Barcelona, el área deportiva culé se ha interesado en su fichaje como agente libre. El centrocampista francés se quedó sin equipo el pasado 30 de junio, con lo que podría ser una opción interesante teniendo en cuenta los problemas económicos que arrastra el club blaugrana.
Las altas exigencias de Rabiot, un problema para el Barça
Cabe recordar que Adrien Rabiot ya estuvo en el radar del Barça en 2019, cuando terminó su contrato con el Paris Saint-Germain. No obstante esto, las elevadas exigencias económicas que pedía su madre, que sigue siendo su agente, hicieron que se acabara decantando por la oferta de la Juventus, superior a nivel económico. Cinco años más tarde de esto, Rabiot vuelve a ser una opción para el Barça, pero sus pretensiones financieras siguen siendo altas, pues pide 60 millones de euros distribuidos en cuatro años, según la fuente citada anteriormente.
Evidentemente, es una cifra muy elevada para un jugador que ya tiene 31 años, con lo que parece complicado que el Barça pueda hacer este desempeño económico, sobre todo si antes no hay ninguna baja importante. Sea como sea, lo que es evidente es que al conjunto blaugrana se le suma una nueva alternativa para el centro del campo. Faltará ver cuál es la decisión final del club.