La posible vuelta de Joao Cancelo al FC Barcelona está generando más controversia de lo que el club podría haber anticipado. Aunque desde la directiva, con Deco a la cabeza, y el entrenador Hansi Flick, se valora positivamente su regreso, la situación dentro del vestuario no es tan favorable para el jugador portugués. Cancelo no dejó precisamente una buena impresión durante su anterior etapa en el club, y este hecho está siendo un obstáculo considerable en su potencial reincorporación.
En medio de los movimientos del mercado de fichajes, la inminente salida de Ilkay Gündogan ha abierto la puerta para que el Barça pueda realizar nuevas incorporaciones. Gündogan, quien ha llegado a un acuerdo verbal para regresar al Manchester City bajo las órdenes de Pep Guardiola, dejará un espacio significativo en la masa salarial del club catalán. Esto permitirá al Barcelona inscribir a Dani Olmo para el próximo partido de liga contra el Athletic Club y, posiblemente, plantearse algún otro fichaje.
El favor que Guardiola quiere a cambio de sacar a Gündogan del Barça
Pero Guardiola no hará un favor al Barça sin consecuencias. Varias fuentes han hablado ya de que, a cambio, el Barça volverá a incorporar a Joao Cancelo, un jugador que el míster de Sanpedor quiere fuera de su equipo cuanto antes. Las posibilidades pasarían por una compra este verano o por una cesión con compra obligatoria el próximo curso, siendo la segunda la que más encajaría al conjunto azulgrana.
Deco y Hansi Flick ven en Cancelo un jugador capaz de aportar al equipo, sobre todo en una posición que el Barça necesita reforzar. Sin embargo, no tiene muchos más aliados en el club catalán. La realidad es que su reincorporación podría reabrir viejas heridas y causar más problemas de los que resolvería. El regreso de Cancelo no sería bien recibido por muchos en el vestuario del Barça.
Cancelo no tiene buena fama en el vestuario del Barça
Según reportes del diario Sport, Cancelo no dejó amigos en su anterior estancia. Su comportamiento y actitud generaron tensiones entre los jugadores más influyentes del equipo, lo que ha creado una atmósfera de desconfianza en torno a la posibilidad de que vuelva a vestir la camiseta azulgrana.
Uno de los mayores problemas que Cancelo enfrentó fue su relación con los jugadores jóvenes del equipo. Se comenta que su actitud distante y, en algunos casos, arrogante, creó un ambiente incómodo que llegó a oídos de Guardiola en el Manchester City. Esta misma actitud podría ser la que ahora complica su regreso al Barça, donde los líderes del vestuario no olvidan fácilmente los problemas del pasado.