Un Carlos Alcaraz crecido vence a Daniil Medvedev (7-6, 3-6, 4-6) y 5-6 y llega pletórico para la reválida de Wimbledon. El tenista murciano ha superado su último escollo antes de la final con remontada incluida y se verá las caras con el ganador del Djokovic-Musetti de esta tarde.

55 minutos para decidir la primera desigualdad

A dos pasos para convertirse en el noveno profesional que revalida título de una edición a otra, la cita de este martes de Carlos Alcaraz en el All England Club era su último examen antes de la gran final. El murciano, vigente campeón del Grand Slam británico, tenía uqe medirse con un hueso como Daniil Medvedev.

El ruso, desde un buen principio, se ha dedicado a presionar mucho a Alcaraz y a exigirle jugar desde el fondo. Ha sabido forzar los errores del español que han acabado con la primera manga en la cuerda floja con el 2-5, pero Carlitos se ha aferrado al primer set como a un clavo ardiendo y ha forzado el tie-break al cabo de 52 minutos de juego. Sea como sea, Medvedev, que casi no ha fallado ningun golpe en el primer parcial, lo remataba con un fulgurante juego de desempate (77-61).

Daniil Medvedev, durante las semifinales / Foto: EFE

Alcaraz se enchufa e iguala la contienda

Medvedev se ha acabado adjudicado el primer set tras 55 minutos de juego muy completos por su parte, pero Alcaraz, que estaba muy espeso en los servicios, ha empezado a sentirse más cómodo en este aspecto. Solo un ace para el murciano en la primera hora de semifinal, pero Medvedev, todo sea dicho, tampoco ha sido dominador en su primer ataque. Ambos se han roto el servicio en dos ocasiones. Sea como sea, Medvedev ha fallado mucho menos.

Alargar los puntos favorecía al ruso, precisamente, porque Alcaraz se sabía impreciso, pero en el segundo set, el número 3 ha estado mucho más autoritario, haciendo buenos los servicios que tanta falta le han hecho durante la primera manga y, sobre todo, ganando seguridad desde el fondo de la pista.

Carlos Alcaraz, celebrando un punto / Foto: EFE

Alcaraz entra en modo ataque

Daniil Medvedev no le perdía la cara al partido. Ni mucho menos. Pero Carlos Alcaraz empezaba a enchufarse y el número 5 no ha podido mantener el listón prácticamente impecable del primer parcial. El español mantenía el notable restando, pero maquillaba de manera considerable su nota en los servicios y se ponía el set de cara para el desempate.

Medvedev trataba de mantener el partido táctico, contrarrestando el buen momento de su rival, pero Carlos Alcaraz, aunque era consciente de que el partido apuntaba a ser largo, no ha dejado de pisar el acelerador, sabedor que Medvedev se encontraba en un momento delicado. Con todo, cuando el parcial estaba a punto de caramelo, Carlos Alcaraz ha perdonado una volea de set y los dos puntos que la seguían inmediatamente han ido a parar al casillero del ruso, pero el parcial ha acabado con un 4-6 que ha puesto el 1-2 en el global.

Alacaraz / Foto: EFE

Carlos Alcaraz saca la esencia para presentarse en su segunda final de Wimbledon consecutiva

Con los servicios ya por la mano, con mucho más tacto en el revés y con Medvedev muy lejos de su planteamiento inicial, Carlos Alcaraz ha empezado a encontrar momentos para sus características dejadas. El ruso lo ha luchado como el que más, pero no estaba pudiendo alargar los puntos como el primer set y Alcaraz ha corrido menos y mejor. Finalmente, la cuarta y última manga del partido se ha resuelto con un 4-6 definitivo para el español que no significa otra cosa que la segunda final de Wimbledon consecutiva para Carlos Alcaraz. A sus 21 años, el domingo irá a por su cuarto Grand Slam.