Carlos Ibáñez, propietario de la empresa I3 Ventures, ha reconocido ante el juez del caso Barçagate que fue el FC Barcelona quien ordenó crear los perfiles en redes sociales para atacar a personas vinculadas al barcelonismo como Guardiola, Laporta, Roures, Piqué o Xavi, entre otros muchos. "Atacábamos a Guardiola, Laporta o Rures porque atacaban al Barça", ha admitido Ibáñez, tal y como destapan este lunes la agencia EFE y el programa Què t'hi jugues! de SER Catalunya, que han tenido acceso a los audios de la declaración.
El club, informado de todo
"Laporta, Guardiola o Roures atacaban al Barça y nosotros tratábamos de controlar el daño mostrando la hemeroteca. No tenía que ver con mejorar el prestigio del Barça, sino de protegerlo con respecto al daño. Roures decía que la gestión del club era pésima y mostrábamos que tenía causas en la que era culpable por corrupción, por lo tanto, no parece que tenga demasiada entidad moral", añade el propietario del grupo Nicestream.
En la declaración, además, Carlos Ibáñez ha declarado que I3 Ventures informaba al Barça de todo lo que hacía, por lo que es evidente que el club era conocedor en todo momento de lo que sucedía en las redes sociales. "Hicimos más de 800 informes y se reportaba todo lo que se hacía. Todo estaba reportado como parte del trabajo que se hacía. Figuraba en los informes. El cliente es la empresa, pero cuando se habla de la reputación cuidamos la reputación de la empresa y de la comisión directiva. Cuando se ataca a una empresa se ataca a quién dirige la empresa. Tanto es así, que cuando se cometió una falta por parte de la directiva, el caso se llama Barçagate, no se llama "nombre y apellido gate", ha explicado.
"El Barça nos debe unos 200.000 euros"
Ibáñez ha aprovechado la declaración para recordar que el Barça les debe "unos 200.000 euros" y ha expuesto que tiene "toda la intención de reclamarlo" cuando acabe "este tema", porque cumplieron "todo el contrato". Además, también ha asegurado que el fraccionamiento fue algo ordenado por el Barça. "El club tenía centros de costes asociados a distintas áreas y precisaban asignarles a las diferentes áreas (Masia, BIHUB, Fundación...) el precio que le correspondía a cada una de estas áreas".
El propietario de I3 Ventures ha especificado que "cuando les rescindieron el contrato les aseguraron que siguieran trabajando 30 días bajo la lógica que la consultora Price Waterhouse Coopers esclareciera los hechos y que se cobraría lo que correspondía".