En el Barça hay varios jugadores que tienen muy complicado volver a jugar bajo las órdenes de Xavi Hernández o, en cualquier caso, tener algo de importancia en el equipo, más allá de un papel residual. El caso más paradigmático de ello es el de Samuel Umtiti. Las lesiones han hecho desaparecer al grandísimo central que se vio en sus primeras temporadas de blaugrana, pero lo que no han hecho desaparecer sus problemas físicos ha sido su contrato.

Neto tiene los días contados

Con un sueldo de crack, ha sido imposible colocarlo en ningún equipo y el Barça se ha visto obligado a quedárselo. Mateu Alemany le renovó hace poco hasta 2026, repartiendo su sueldo en más años para poder salvar el límite salarial e inscribir a Ferran Torres, pero el próximo verano volverán a intentar venderlo, aunque no será el único.

Neto atrapa un balón durante un partido de pretemporada / EFE

Uno de los que está viviendo sus últimos meses de culé es el portero Neto. El brasileño nunca ha llegado a ser un competidor digno para Ter Stegen en la portería, y el Barça ya ha decidido que quiere prescindir de él. El exguardameta de Fiorentina, Juventus o Valencia tiene una temporada más de contrato, hasta 2023, pero Mateu Alemany intentará conseguir un traspaso que permita, además de liberar masa salarial, ingresar algo de dinero.

No obstante, su salario también es un impedimento para la gran mayoría de equipos, y eso podría complicar su salida. Si eso sucediera, el Barça se está planteando una medida extrema que sería concederle la carta de libertad para que se marchara como agente libre, según asegura Catalunya Radio.

Competencia o futuro

La misma información asegura que el Barça estaría dispuesto a pagarle una parte del año de contrato restante para poder dejar vacante el puesto de segundo portero. En ese sentido, el Barça deberá decidir con que perfil quiere ocupar el rol de portero suplente. 

Iñaki Peña, entrenando con el Galatasaray / @GalatasaraySK

O bien fichar a un portero de garantías que pueda competirle de tú a tú a un Marc-André Ter Stegen en horas bajas, o darle la alternativa a Iñaki Peña. El portero alicantino sigue siendo un activo del club, como dijo Mateu Alemany, director de fútbol de la entidad, y está aprovechando su cesión al Galatasaray turco para demostrar su valía.

La última muestra, precisamente contra el Barça. En la ida de los octavos de final de la Europa League, Peña visitó el Camp Nou con el escudo del Galatasaray en el pecho y frustró todos los intentos de los jugadores blaugrana para perforar su marco. Un par de grandes paradas a Memphis, y otra a un cabezazo, fueron claves para mantener el 0-0 durante los 90 minutos.

 

Imagen principal: Samuel Umtiti, sentado en el banquillo del FC Barcelona / Europa Press