El Chelsea gana la Europa League después de golear al Arsenal en la final (4-1). Una segunda mitad de efectividad máxima del Chelsea ha acabado por destrozar a un Arsenal que había hecho méritos para dominar el partido. Y también por el factor Eden Hazard, que con un doblete ha decantado la final.

El Arsenal no tiene miedo

El Arsenal ha sido quien mejor ha planteado la final de inicio. Sin miedo, con atrevimiento, abriendo el juego y acelerante el partido. Los gunners han dominado y han creado las mejores ocasiones durante los primeros minutos.

Unai Emery, con tres títulos de Europa League ganados con el Sevilla, ha sabido como controlar el partido. Poca posesión, poca idea de juego-posición, pero ataque grupal con el clásico fútbol inglés. Al Chelsea, con mucho temor de cometer errores, se le ha visto apagado durante un primer tiempo en qué no ha sabido contrarrestar el juego del Arsenal.

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Sólo las tímidas apariciones de Hazard, que podría haber jugado su último partido con el Chelsea antes de marcharse al Real Madrid, han puesto a los blues dentro del partido. Y de la banda gunner, la profundidad de los laterales y la velocidad de Aubameyang y Lacazette han sido las armas utilizadas para el Arsenal.

El Chelsea tiene a Hazard

Pero si los gunners no han marcado en el primer tiempo, los segundos 45 minutos han sido un festival de goles. El Chelsea ha dado un paso adelante y el Arsenal ha sido quien se ha atemorizado entonces. Jorginho y Hazard se han convertido en los líderes del partido y los blues lo han aprovechado.

Un cuarto de hora de locura para que el Chelsea llevara la final a su terreno. Primero ha sido Giroud, que con la cabeza ha aprovechado un centro de Emerson para marcar el gol que movía al marcador en el minuto 49. Y después, primero en el 60 y luego en el 65, han aparecido Pedro, el ex del Barça, y Hazard, que ha marcado el segundo y el tercer gol del Chelsea. El tercero, de penalti.

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Una ventaja que ha obligado a Emery a hacer cambios rápidos en un ultimátum para meterse dentro de la final. Y lo han conseguido con un golazo de Iwobi en el 69, pero que no sido suficiente porque tres minutos después Hazard replicaba con su doblete particular.

Poco más ha pasado en la final porque el Chelsea la tenía ganada. Maurizio Sarri le da al Chelsea el segundo título de Europa League de la historia en su segunda final. Y el Arsenal se queda sin título, igual que en el 2000 cuando llegó a la final de la UEFA.

El dominio inglés en Europa se confirmará el próximo sábado con la final de la Champions League entre el Tottenham y el Liverpool.