En Red Bull están absolutamente convencidos de que volverán a salir campeones del Mundo, gracias a la increíble habilidad de Max Verstappen, quien ha conquistado el trofeo de Fórmula 1 durante los últimos cuatro años, de manera consecutiva. A pesar de la salida de Adrian Newey, y de que ya no tienen el mejor coche, en la escudería de Milton Keynes confían en su líder, que sigue siendo capaz de exprimir todo el potencial del vehículo.
Ya no tienen el mejor coche, y se han visto claramente superados por McLaren, que es la gran amenaza, y que el curso anterior ya puso las cosas muy difíciles. Pero el neerlandés marca la diferencia gracias a su facilidad para adaptarse a todo tipo de situaciones, y su experiencia y su fuerte personalidad provocan que sea prácticamente invencible. Así lo demostró en el último Gran Premio que se celebró, en Japón, donde completó una actuación fantástica.
Sin duda alguna, fue una de las mejores carreras de su vida, ya que no cometió ni un solo error, y esto le permitió ganar su primera prueba este año, y dejar muy claro que la pelea por el campeonato será muy ajustada. Y Christian Horner, antiguo piloto y actual director deportivo del Oracle Red Bull, ha afirmado que no cree que haya nadie que ahora mismo pueda superar al ‘1’. Y ha revelado cuál es el principal problema que tendrán en McLaren.
Porque mientras en Red Bull está muy claro quién es el piloto referencia, Verstappen, y el resto deberán de ayudarlo a conseguir su objetivo, un mensaje directo a Yuki Tsunoda, Liam Lawson e Isack Hadjar, en la escudería de Woking tendrán que conseguir que sus dos pilotos principales, Oscar Piastri y Lando Norris, no se acaben molestando. Y es que ambos tienen claro que quieren ganar, y que desean pelear por el trofeo.
La relación entre ambos es cada vez más tensa, y Bruce McLaren no puede ocultar la preocupación que existe. Porque las guerras internas que existen dentro del box juegan claramente a favor de los intereses de Red Bull, y de Verstappen.
En McLaren no quieren que se repita la historia con Fernando Alonso y Lewis Hamilton
Un duelo de egos que no es nuevo en McLaren, donde ya vivieron una historia muy similar, con Lewis Hamilton y Fernando Alonso, que tuvieron todo tipo de enfrentamientos, y esto provocó que el título de 2007 se acabara decantando para Kimi Räikkönen, que estaba en Ferrari.
Una historia que se puede repetir, en esta ocasión, con Piastri y Norris como protagonista, como advierte Horner.