El Barça y el Real Madrid se vuelven a enfrentar en la pretemporada en Estados Unidos (domingo 4 de agosto, 1.00h) con la mirada fijada en el espectáculo que pueden llegar a ofrecer sobre el césped del MelLife Stadium. Nueva Jersey se pasará al fútbol por unas horas para ver el partido más esperado del año, un Clásico de preparación, pero un Clásico en definitiva. Y aunque las bajas son significativas, con los mejores jugadores internacionales de vacaciones y con un puñado de jóvenes en los equipos, sí que será un partido con alicientes y en el cual se buscará ganar de todas todas.
La juventud es el futuro del Clásico
Es una oportunidad para ver a los jóvenes y al futuro del Clásico. Si ahora hace un año se despertó Fermín López, consiguiendo un golazo y conduciendo la victoria culé —que esta vez no estará porque está jugando los Juegos Olímpicos—, ahora podría ser el momento de ver brillar a algún otro joven talento culé. O quizás alguno de merengue que quiera ser protagonista antes de tiempo y convencer a su entrenador.
Será un duelo de nuevas ilusiones. Los seguidores del Barça observarán qué pueden hacer el portero Ander Astralaga, héroe de la victoria culé en los penaltis ahora hace unos días contra el Manchester City, Sergi Domínguez, Gerard Martín, Marc Bernal, Marc Casadó, Pablo Torre, Julián Araujo, Pau Víctor, Guille Fernández, Noah Darvich, Álex Valle, Quim Junyent, Andrés Cuenca, Antonio Fernández, Unai Hernández, Maka Faye, Alexis Olmedo o Diego Kochen, como también otros más conocidos como Vitor Roque, Alejandro Balde o Clément Lenglet, entre otros.
Y desde el lado madridista querrán poner el foco en Endrick Felipe, Arda Güler o Brahim Díaz, pero también en algunos jóvenes como Nico Paz, Mario Martín, Álvaro Rodríguez, Raúl Asencio, César Palacios o Jeremy de León, entre otros. Y Carlo Ancelotti, igual que pasa con Hansi Flick del lado culé, tendrán que seguir con su casting para iniciar la temporada oficial dentro de unas semanas.
"Un Clásico siempre es un Clásico"
Pero es que igual que hay ganas de ver a los más jóvenes y que se puedan reivindicar contra el eterno rival, también se tiene que poner el foco en la victoria. En un Clásico no hay excusa que valga para justificar una derrota. El portero alemán Marc-André Ter Stegen, que hará su debut en la pretemporada en el MelLife Stadium, ha reconocido que "un Clásico siempre es un Clásico", además de añadir que "es un partido superimportante, en el sentido que seguramente sea el partido de la gira que más atención genera a la gente".
Ter Stegen quiere ganar y el Barça podrá contar con algún efectivo más como podría ser Jules Kounde, y ya sin Oriol Romeu, que ha abandonado la concentración culé para resolver su futuro. Un Barça con cambios pero también con nuevas ideas y con Hansi Flick en el volante. Y seguro que aunque sea un Clásico de pretemporada no tiene porque ser un duelo descafeinado.