Claudio Giráldez fue el salvador del Celta de Vigo durante la pasada temporada. La directiva apostó por él gracias al fantástico trabajo que había realizado en el filial durante los años que estuvo, y en el primer equipo tuvo un impacto inmediato. Logró esquivar el descenso a La Liga Hypermotion, y esta campaña comenzaron obteniendo unos muy buenos resultados, que provocaron que estuvieran en la pelea por clasificarse a competiciones europeas.
Pero todo ha cambiado en las últimas semanas, ya que las sensaciones han empeorado drásticamente. Aunque es cierto que no ha podido contar con el capitán y la estrella del club, Iago Aspas, por culpa de una lesión, esto no sirve como excusa para justificar la preocupante dinámica en la cual han entrado. En La Liga EA Sports no conocen la victoria desde el pasado mes de diciembre, cuando superaron a la Real Sociedad, y ya son cuatro jornadas consecutivas sin ganar.
Tienen un balance de un empate y tres derrotas, y la última fue especialmente dolorosa, ya que se dejaron los tres puntos contra el Valencia, que es penúltimo en la clasificación. En Balaídos ocupan una cómoda decimotercera plaza, pero no pueden estar relajados, ya que solamente están cuatro puntos por encima de los puestos de descenso, y necesitan reaccionar cuanto antes si no quieren complicarse la vida enormemente.
Giráldez ha comenzado a recibir críticas y a estar en el punto de mira, y es muy cuestionado, incluso por la afición. Porque las cosas no están funcionando como deberían, y hay piezas clave que comenzaron a un nivel sublime y que ahora mismo están a años luz de su mejor versión, como es el caso de Oscar Mingueza o de Borja Iglesias. Y han señalado al técnico gallego como el principal responsable de este problema.
Asimismo, en el mercado de invierno han sufrido la baja de Anastasios Douvikas, quien era un valioso revulsivo para el ataque, y han traído a Iker Losada a préstamo por el Betis, quien llega sin prácticamente ritmo de competición.
El Celta empieza a buscar alternativas a Giráldez
En el Celta no se han quedado de brazos cruzados, y han comenzado a buscar alternativas para asumir el cargo de entrenador si Giráldez finalmente acaba siendo despedido.
Y entre los candidatos han aparecido nombres como los de Quique Sánchez Flores, Javi Gracia o Luis García Plaza.